Tras solamente participar en la primera vuelta apoyando a los candidatos al parlamento de Chile Vamos, el senador Manuel José Ossandón (RN) aceptó hacer campaña en la segunda vuelta por el expresidente Sebastián Piñera.
Dice que las condiciones para apoyarlo no responden “a un capricho personal” y que están basadas “en la convicción de que esto es lo que necesitamos para dar una señal que, como centro derecha, nos la jugamos por las preocupaciones de la ciudadanía”.
Ayer cerró sus actividades en Puente Alto junto a Cecilia Morel, esposa del candidato. Comuna que el mismo senador afirmó que no votará en su mayoría por Sebastián Piñera, a pesar del puerta a puerta que ha realizado con el presidenciable en más de una ocasión.
Declaraciones polémicas que incluso han alcanzado a los propios colaboradores de la campaña, como el diputado Felipe Kast (Evópoli). Luego que éste afirmara que no apoyaría un proyecto de aumento en la gratuidad al 90%, Ossandón sostuvo que “con ese tipo de voceros es casi imposible ganar una elección”.
- Usted ha criticado a Felipe Kast y a José Antonio Kast estas últimas semanas, ¿cree que el tono de sus declaraciones han desordenado las filas del piñerismo?
- No es el minuto para recriminaciones. Ya habrá tiempo para evaluaciones. Menos de un senador que, por no estar en el comando, no conoce las dinámicas internas. El único llamado que me gustaría hacerle a quienes han asumido vocerías dentro del comando de Sebastián Piñera es que se ajusten a lo que el candidato define. Es él quien lidera, es él quien marca la cancha. Hoy no es tiempo para aprovechar la campaña para beneficio propio.
- ¿Ve que su electorado se ha decepcionado con su apoyo a Piñera?
- Probablemente, hay una porción importante de nuestro electorado que no se esperaba este apoyo. Pero en mi trayectoria política nunca me he movido por conveniencia. Me la juego por la responsabilidad y por mi país. Hoy estoy convencido que ante la continuidad de la Nueva Mayoría, liderada por Alejandro Guillier y flanqueada por el Frente Amplio, la alternativa de un gobierno de un Chile Vamos ordenado y liderado por Sebastián Piñera es lo mejor.
- Usted tildó de traidores a empresarios que piensan salir del país si gana el senador Guillier, pero el empresariado es parte importante del votante de Sebastián Piñera, ¿cómo cree que caen estas declaraciones?
- No dejaré de decir lo que pienso por no complicar a algún sector en particular. Mi sentido de responsabilidad no es compatible con ese tipo de amenazas del empresariado. Estoy convencido que este tipo de presiones son las que terminan deslegitimando a los empresarios. Pero seamos claros, son los menos quienes han hecho esta amenaza. La mayoría de los emprendedores seguirá luchando por aportar al país y darle viabilidad a sus proyectos.
- También dijo que a pesar de su apoyo, Sebastián Piñera no ganará en Puente Alto, ¿sus puerta a puerta en la comuna no hacen el peso?
- Estoy trabajando firme para que hagan peso y sean relevantes. Sin embargo, fui claro en señalar que nuestra apuesta siempre fue acortar la brecha entre Sebastián Piñera y Alejandro Guillier. Sería iluso e irresponsable pensar que una comuna que históricamente ha tenido una inclinación por candidaturas de izquierda hoy se volcará en masa a votar por la candidatura de centro derecha sólo porque un exalcalde lo apoya. El domingo la brecha se acortará y esa será la sorpresa que daremos.
- ¿Gana Sebastián Piñera el domingo?
- Será una elección estrecha, de eso no cabe duda. Cada voto será relevante, pero tengo la esperanza de que Sebastián Piñera logrará finalmente imponerse.
- ¿Qué tanto puede incidir en esta elección su apoyo?
- Los análisis muestran que comunas del sector sur de Santiago, donde está el fuerte de nuestro electorado pueden ser determinantes. Como dije, nuestro votante no se mueve por razones militantes. Vota por la candidatura que logre motivarlo y darle la confianza de que se la jugará por sus problemas.
“La política cambió y la ciudadanía está más exigente”
- ¿Cómo ve la derecha el próximo año, debe replantearse algunos temas?
- Independiente de lo que pase el domingo, la situación actual permite extraer varios aprendizajes. Espero que luego de la elección tengamos tiempo para hacerlo. El diagnóstico que algunos siempre hemos sostenido y que ha sido bien criticado, no estaba tan perdido. La política cambió y la ciudadanía está más exigente. Para dar respuesta a ello se requiere renovación, un nuevo estándar en transparencia y probidad, tolerancia cero con el abuso, venga de donde venga. Una mayor empatía, lo que nosotros llamamos cambiar la calculadora por el corazón. Mayor cercanía, lo que implica dejar la comodidad de las posiciones de poder y salir a la calle a compartir y conocer la experiencia de primera fuente. Un cambio que pasa mucho más por modificar la forma de hacer política que por cambiar las ideas que se defienden, como algunos erróneamente sugieren.