La Comisión para el Mercado Financiero (CMF) informó este miércoles los resultados operacionales de la industria bancaria durante febrero. En el segundo mes del año el sector ganó US$ 555 millones y acumuló utilidades por US$ 1.081 millones en los dos primeros meses del año, anotando un crecimiento de 28,02% respecto a 12 meses.
Los principales bancos privados habían informado previamente sus resultados preliminares. Banco de Chile reportó ganancias mensuales en febrero de $ 98.738 millones, aumentando 100% respecto a 2021. Santander tuvo utilidades mensuales de $ 93.574 millones, anotando un incremento interanual de 44,7%.
Bci ganó durante el segundo mes del año $ 50.322, con un retroceso de 1,9% en comparación a 2021. Scotiabank obtuvo utilidades mensuales de $ 32.937 millones, anotando una caída de 9,5% frente a febrero de 2021. En tanto, Itaú obtuvo ganancias de $ 44.637 millones, un 20,9% superior a 2021.
En cuanto a la actividad crediticia de la industria, el regulador comunicó que las colocaciones del sistema bancario crecieron 2,59% en 12 meses, inferior al alza registrada el mes anterior, de 3,11%, pero por sobre la caída de 2,24 % ocurrida en el mismo mes del año anterior.
Desde la CMF explicaron que este resultado se debió al crecimiento de todas las carteras. No obstante, comparado con enero, la menor expansión obedeció a la variación en 12 meses de las colocaciones comerciales, de 0,40% y de las colocaciones para vivienda, de 5,65%; ubicándose ambas, por debajo del crecimiento exhibido el mes anterior de 0,95% y 6,16%, respectivamente.
De igual forma, se destacó la expansión de las colocaciones de consumo por tercer mes consecutivo, alcanzando un 3,59% en 12 meses, por sobre el 2,44% registrado el mes anterior y el 0,62% de diciembre de 2021, recuperándose de las caídas sucesivas registradas desde marzo de 2020 a noviembre de 2021.
En materia de riesgo de crédito, los indicadores presentaron un comportamiento mixto en el mes, no obstante, la cartera de consumo registró un alza en todos sus coeficientes, mientras que en vivienda los indicadores no registraron variación respecto del mes anterior.
Respecto de un año atrás, todos los indicadores de riesgo de crédito sobre colocaciones y por cartera registraron una disminución.
El índice de provisiones sobre colocaciones y el de cartera con morosidad de 90 días o más aumentaron en el mes a un 2,40% y 1,28%, respectivamente, explicado en cada caso, por similar trayectoria en los índices de la cartera comercial y de consumo.
Por su parte, el índice de cartera deteriorada retrocedió a un 4,47% explicado por una disminución en el coeficiente de la cartera comercial.
Las alertas de la banca
Desde la Asociación de Bancos (Abif) analizaron las cifras de febrero e indicaron en un reporte que "el crédito hipotecario perdió fuerza en los primeros meses del año".
De acuerdo a los números del gremio, en enero y febrero el flujo de colocaciones fue un 42% menor —en términos reales— que en igual período del año anterior, alcanzando un promedio mensual de solo US$ 643 millones, cifra que se compara con un stock de colocaciones del orden de US$ 86 mil millones".
Apuntaron que "esta desaceleración del crédito para la vivienda se enmarca en un contexto económico con una tasa hipotecaria más alta".
En lo que respecta a créditos de consumo, la banca señaló que "continuó la senda de recuperación de los meses anteriores, donde el dinamismo de las colocaciones en tarjetas y líneas de crédito, que en febrero registraron un avance anual de 17,7%, contrasta con el aún débil desempeño de los créditos en cuotas, que disminuyeron 4,4% en igual período".
Añadieron que "en términos absolutos, el saldo vigente de colocaciones de consumo alcanza US$ 32 mil millones en febrero, de los cuales un 59% corresponde a créditos en cuotas. Por su parte, el flujo mensual promedió US$ 925 millones en los últimos 12 meses".
En febrero, la morosidad mayor a 90 días se situó en 1,29% de las colocaciones totales, muy por debajo del promedio de los últimos diez años que es en torno a 2%.
La Abif alertó que la morosidad de consumo mostró una reversión de tendencia en los meses más recientes, habiendo acumulado un aumento de 25 puntos base desde el mínimo histórico de octubre pasado, hasta 1,32% de las colocaciones en febrero. Por su parte, la morosidad de las carteras comercial e hipotecaria se mantuvo en niveles bajos, alcanzando 1,40% y 1,08%, respectivamente.