Los precios
internacionales del petróleo volvieron a subir, marcando nuevos mínimos desde
fines de noviembre. La caída del frente aunque canasta de monedas dólar –tras las
medidas reactivadotes de la Reserva Federal-
se constituyó en el principal motor de las alzas.
A esto se
suma una mejoría en las expectativas de recuperación de la economía y, por
ende, de un aumento en la demanda del hidrocarburo.
En ese
contexto, el crudo WTI que se cotiza en Nueva York -y sirve de referencia para
Chile- cerró con un alza mínima de 9
centavos para situarse en los US$ 51,57 por barril, un nuevo máximo desde el 28
de noviembre (US$ 55)
Pese a este
leve aumento, el referencial culminó la semana con un aumento acumulado de US$
5,33.
Al otro
lado del Atlántico, el Brent –de referencia para Europa- cerró las operaciones en
la Bolsa de Londres
cotizándose en US$ 49,33 por barril, esto es US$ 1,24 en relación al cierre de
ayer.
Las decisiones de la Fed entre las que se incluye destinar
hasta US$ 300.000 millones a adquirir bonos de largo plazo
durante los próximos seis meses, han suscitado algunos temores a un
posible rebrote de la inflación y han mermado la fortaleza del dólar
en sus cambios con las principales divisas.
Un dólar más débil hace que las compras de crudo y de otras
materias primas resulten más baratas si se utilizan divisas
fortalecidas.