A mínimos de julio (bajo los US$ 84,92 el barril) se aproximó ayer el petróleo WTI, valorización que reforzó al cierre al anotar US$ 85,66 el barril.
El crudo texano, que a principios de octubre registraba niveles de
US$ 92 el barril, ha visto su precio bajo presión principalmente por la preocupación de la evolución económica de la euro zona, explicaron los expertos.
Según el analista de futuros de energía de Citigroup, Tim Evans, uno de los factores que mantiene afectado al crudo es un dólar más apreciado y un euro más depreciado, ante lo cual han visto liquidaciones de posiciones largas (ventas).
Para la especialista en commodities de Scotiabank, Pat Mohr, las variaciones se resumen en la incertidumbre por las elecciones en EEUU, el impacto negativo del freno al consumo del petróleo en el mundo, la vuelta a producción de algunos yacimientos en el Mar del Norte tras su cierre por mantención y el posible impacto en el crecimiento del PIB de EEUU por el paso del huracán Sandy.