Cómo será trabajar en la era de las máquinas inteligentes
¿Cómo se organiza una sociedad en la que sólo pocas personas hacen algo productivo?
Por: Martin Wolf
Publicado: Miércoles 27 de junio de 2018 a las 04:00 hrs.
Noticias destacadas
Hace años, en 1984, en su libro Los caminos del paraíso, André Gorz, un autoproclamado “reformista revolucionario”, previó, erróneamente, que “la revolución microeconómica lleva a la abolición del trabajo”. Incluso argumentó que “el trabajo asalariado (...) podría dejar de ser una preocupación vital a fines del siglo”. Sus plazos estaban mal. Pero analistas serios creen que la dirección era la correcta. ¿Qué podría significar un mundo de máquinas inteligentes? ¿Se volverán los seres humanos tan irrelevantes económicamente como los caballos? Si es así, ¿qué pasará con nuestro valor individual y la organización de nuestras sociedades?

En una notable presentación reciente, Adair Turner, expresidente del regulador financiero del Reino Unido y presidente del Instituto del Nuevo Pensamiento Económico, enfrentó justamente estas preguntas. Comenzó asumiendo que las máquinas inteligentes eventualmente lograrán desempeñar la mayoría de las formas de trabajo actuales mejor que las personas y a un costo menor. Esto, argumenta, es un tema de cuándo, no de si ocurrirá. Ocurrirá por el avance progresivo del poder de procesamiento, la replicabilidad sin costos del software y el alza del aprendizaje de las máquinas. Los dioses robot nos harán a todos redundantes.
En base a Un futuro que funciona, un reporte publicado por McKinsey Global Institute el año pasado, Turner añade que este futuro no llegará de manera pareja: algunos serán más afectados mucho más pronto que otros. Más aún: incluso si las máquinas inteligentes no pueden realizar todos los aspectos de un trabajo en particular, sí pueden desplazar a muchos trabajadores.
Con la tecnología actual, las tareas física predecibles y la recolección y procesamiento de datos serán especialmente vulnerables. Entre sectores, los “servicios de alojamiento y alimentación”, la manufactura y el transporte serán particularmente vulnerables. Según una publicación de Jason Furman, expresidente del Consejo de Asesores Económicos de EEUU, y Robert Seamans de la Escuela de Negocios Stern, quienes ganan menos y quienes tienen menos educación son más vulnerables.
Productividad y salarios
Turner argumenta que lo que está pasando también explica la “paradoja de productividad” que discutí hace dos semanas. Una gran parte de la explicación podría ser un giro desde empleos relativamente bien pagados en sectores con crecimiento de productividad relativamente rápido, como la manufactura, hacia trabajos relativamente peor pagados en sectores con crecimiento de productividad bajo, como el cuidado personal, la salud a domicilio y las ventas minoristas. De entre los diez sectores de EEUU con mayor crecimiento proyectado en empleo entre 2014 y 2021, que se espera que generen 29% de los nuevos trabajos, ocho tienen sueldos promedio por debajo del nacional. Esto, por supuesto, empeorará la desigualdad, y tendría implicaciones fuertemente negativas para la productividad en general.
Eso no es todo. Turner también sugiere otras razones para la mayor desigualdad y el bajo crecimiento de la productividad promedio. El primero es el alza de actividades de “suma cero”, algunas de las cuales no se miden en la producción económica y pocas de las cuales contribuyen al bienestar social: pensemos en los lobbistas, los abogados tributarios o corredores de bolsa de alta frecuencia. Incluso la educación tiene un carácter de suma cero: es un bien posicional. Más aún, estas actividades de suma cero son bien pagadas y por lo tanto extraen bastante renta. También lo hacen los dueños de propiedades en barrios prósperos. La nueva economía, entonces, es el paraíso del arrendatario.
La segunda es la subestimación del valor de los servicios gratuitos. Esto es posible. Pero los servicios gratuitos -las redes sociales, por ejemplo- podrían, destaca, contribuir poco al bienestar. Ahora mismo, las contribuciones podrían ser mucha miseria personal y la destrucción de nuestras democracias.
Qué viene
Esta es entonces la imagen para el futuro de mediano plazo: bajo crecimiento de la productividad y empeoramiento de la desigualdad. Esto es inconsistente con una democracia estable. Más probable es el agravamiento de las políticas de hoy de avaricia y agravio. El resultado podría ser plutocracia, autocracia populista o una mezcla. Si la automatización termina por hacer a la humanidad económicamente irrelevante, los desafíos serían aún más radicales.
En el mediano plazo, mientras haya prospectos razonables de puestos de trabajo para las personas que quieran trabajar, la política crucial será subsidiar los empleos. También será vital financiar servicios públicos de alta calidad para todos, particularmente salud, educación y transporte. Más aún, como argumenta Dean Baker, la concentración de ingresos desde rentas de escasez pide a gritos mayores impuestos a la riqueza y a los ingresos más abultados, especialmente a la tierra y a la propiedad intelectual. De hecho, la propiedad intelectual está casi con seguridad demasiado protegida ahora. Hay argumentos para protegerla, pero no demasiado. Creo que Adam Smith estaría de acuerdo.
A largo plazo, nuestros descendientes podrían enfrentar aún más decisiones existenciales (siempre que las máquinas les permitan tomarlas). ¿Cómo podrán organizar a la sociedad en un mundo en que pocas personas pueden hacer algo que obviamente productivo para la economía? El mundo podría volverse tecno-feudal, con una élite que contrate grandes cantidades de sirvientes humanos baratos no por su valor, sino por el placer de la dominación. Las personas podrían, en cambio, compartir la abundancia más equitativamente, con todos disfrutando el ocio civilizado que una vez fue provincia de pocos. La nuestra es la primera civilización en ver el trabajo como una vocación. Quizás ese extraño prejuicio necesitará ser descartado.
Eso queda para el futuro lejano, sin embargo, aunque es uno en el que debemos pensar ahora. Pero las tendencias que operan exigen acción. Si la tendencia natural de nuestras economías es hacia un crecimiento eterno de la extracción de ingresos y desigualdad, con sus oscuros resultados políticos y sociales, necesitamos responder de manera calculada y decidida. Ese es el gran desafío.
Te recomendamos
ARTICULOS RELACIONADOS
Newsletters
LO MÁS LEÍDO
Ministro Boccardo y polémica por “amarre” de funcionarios públicos: “Las personas de confianza que entraron con este Gobierno tienen que renunciar el 11 de marzo”
Con relación a la polémica norma, el secretario de Estado dijo que "es el Congreso el que va a tener que evaluar particularmente si esta norma puede prosperar y en qué condiciones, pero eso es parte del debate democrático”.
“El riesgo ya no es teórico. Estamos hablando de proyectos que pueden quedar construidos, pero no recepcionados”: abogado experto advierte por nuevo plan regulador de Antofagasta
Un dictamen de Contraloría que obligó a la Municipalidad de Iquique a invalidar más de 100 permisos ya otorgados, sentó un precedente. "Los planos deben cumplir las normas urbanísticas vigentes al momento de su tramitación final. Hoy hay proyectos en Antofagasta que no cumplen esa exigencia”, dice Rodrigo Andreucci.
Cenco Malls lanza la segunda edición de su desafío de innovación abierta CosmoLab
La convocatoria estará abierta hasta el 31 de enero de 2026 y está orientada a startups y scaleups que integren tecnología, sostenibilidad y digitalización para transformar la operación y la experiencia en centros comerciales de la región.
BRANDED CONTENT
Jorge Carinao: la fuerza de creer cuando todo parece imposible
Te invitamos a conocer la historia de Jorge Carinao, deportista paralímpico chileno que ha transformado la adversidad en fuerza y el esfuerzo en orgullo nacional, demostrando que no existen límites cuando hay convicción y sueños claros. No te pierdas esta inspiradora entrevista
Jorge Carinao: la fuerza de creer cuando todo parece imposible
Te invitamos a conocer la historia de Jorge Carinao, deportista paralímpico chileno que ha transformado la adversidad en fuerza y el esfuerzo en orgullo nacional, demostrando que no existen límites cuando hay convicción y sueños claros. No te pierdas esta inspiradora entrevista
Camila Elizalde; una chef que ha hecho del perfeccionismo una fuerza transformadora
Conoce aquí la entrevista a una de las chef más destacadas a nivel nacional y americano en el arte de la pastelería. En este capítulo, Camila reflexiona sobre los desafíos de liderar en un entorno competitivo y la importancia de construir espacios donde la excelencia y la empatía convivan. Mira la entrevista haciendo aquí.
En Perfeccionistas entrevistamos a un deportista chileno que quiere llegar tan alto como sus saltos
Mauricio Molina nos cuenta de su pasión por el BMX y cómo se convirtió en el primer chileno en competir en esta disciplina en unos Juegos Olímpicos y ser parte del selecto grupo de los 25 mejores del mundo.
Instagram
Facebook
LinkedIn
YouTube
TikTok