Un equipo enojado es la peor de las pesadillas de un jefe, quien debe hilar muy fino si quiere motivar a profesionales ahogados en el desánimo. La falta de comunicación e información genera desconfianza y es, según Alfonso Elósegui, director de Interim Management de BDO, uno de los motivos que provoca mayor malestar entre los empleados. La inexistencia de un proyecto claro también causa inseguridades que no favorecen el clima laboral, igual que la escasez de liderazgo, dice.
Conocer las causas puntuales de ese enfado y ser realista con la situación, destruyendo falsas expectativas, es la mejor actitud que puede adoptar un líder para afrontar el conflicto cuya resolución total depende, la mayoría de las veces, de toda la organización.
Eduard Vinyamata, director del campus de la Universitat Oberta de Catalunya, señala que es crucial conocer las razones que han generado esa ira porque casi siempre se adopta una actitud reactiva y si no se reflexiona sobre ello, se opta por la defensa, el ataque, la represión o el rechazo. Es como si un médico se enfadara porque acude a verle una persona enferma.
Para mejorar el ambiente organizacional, los expertos recomiendan profundizar en la comunicación corporativa, estableciendo formalmente foros de comunicación internos, además de ejercer un optimismo inteligente y organizar reuniones en lugares agradables, fuera del trabajo, donde se pueda conversar de forma distendida. "Se trata de sacar el problema a la luz, de ser suave con las personas pero duro con el conflicto. Si el problema está fuera, será más fácil observarlo y encontrar soluciones favorables para el colectivo, concluye Vinyamata.