Con el fin de transformar al turismo en la principal actividad económica de las comunidades pehuenches del Alto Biobío, Endesa Chile, a través de la Fundación Pehuén, está implementando el proyecto Koyaluf.
El proyecto que cuenta con una inversión de $ 100 millones tiene como meta capacitar a 40 líderes emprendedores en un plazo de tres años, para que junto a sus familias, puedan desarrollar diversas actividades turísticas complementarias, tales como camping, cabalgata o servicio de hospedaje, de manera que el futuro la fundación -que fue creada tras la construcción de la central hidroeléctrica Pague- pueda optar a recursos propios.
Junto con potenciar fuertemente las costumbres y tradiciones pehuenches, su paisaje, flora y fauna, se busca profundizar temas de diseño e implementación de turismo pehuenche, posicionamiento en mercados y seguimiento técnico a los planes de negocio. Se apuntará también a turistas con mayor poder adquisitivo, ya que hoy la zona es destino de mochileros que no dejan ingresos.
Julio Mellado, director ejecutivo de la Fundación, explica que el lugar, al ser un sector cordillerano, tiene pocas posibilidades desde el punto de vista productivo de generar ingresos (por condiciones de calidad de la tierra), “por lo que el turismo va a generar un impacto importante, porque además tenemos un programa ganadero y de mujeres artesanas, que en algún minuto se van a cruzar generando una unidad espacial sustentable”, indica. También se pretende incorporar a los operadores turísticos nacionales e internacionales.
Gran zona turística
El proyecto se está trabajando con el Servicio Evangélico para el Desarrollo, quienes han implementado el circuito turístico pehuenche Trekaleyin, que ya está consolidado y ofrecen productos complementarios que pueden unirse a Koyaluf, “de tal manera que el territorio en su conjunto conforme un lugar turístico bien definido”.