China debería aplicar un estímulo adicional de hasta 1,5 billón de yuanes (US$ 209 mil millones) para impulsar el consumo y mantener la flexibilidad cambiaria, para contrarrestar el impacto en el crecimiento de los aranceles estadounidenses, afirmaron académicos, entre ellos un asesor del Banco Popular de China (PBOC, su sigla en inglés).
Desde abril, la economía china enfrenta “nuevas disrupciones” derivadas del alza de tarifas y una deflación persistente, según un informe publicado este viernes por Huang Yiping, integrante del comité de política monetaria del banco central, junto a Guo Kai, exfuncionario del PBOC, y Alfred Schipke, director del Instituto de Asia Oriental de la Universidad Nacional de Singapur.
“Para abordar estos desafíos, China debe adoptar un enfoque contracíclico más contundente y avanzar con decisión en reformas estructurales”, señalaron.
Los expertos recomendaron un paquete adicional de entre 1 billón de yuanes y 1,5 billón de yuanes en 12 meses para estimular el consumo de los hogares y mitigar los efectos de los aranceles de entre 20% y 30% impuestos por Estados Unidos.
Esta propuesta contrasta con los 300 mil millones de yuanes que el Gobierno central prevé obtener este año, mediante la emisión de bonos especiales de largo plazo, para subsidiar compras en su programa insignia de estímulo al gasto.
En general, los economistas esperan que Beijing relaje aún más su política económica en los próximos meses, para amortiguar una eventual caída de las exportaciones ante los aranceles del presidente estadounidense Donald Trump y el creciente escrutinio sobre el desvío de mercancías chinas. A nivel interno, el mercado inmobiliario sigue debilitado y las presiones deflacionarias aumentan debido a la reducción de precios por parte de las empresas, en un contexto de menor expectativa de ingresos.
Huang y sus colegas ven margen para que el banco central reduzca aún más las tasas de política monetaria y oriente a los bancos a bajar sus tasas preferenciales de préstamo, a fin de apuntalar las expectativas de un mayor crecimiento nominal, clave para la rentabilidad corporativa. También sugieren mantener una flexibilidad “suficiente” en el tipo de cambio del yuan para absorber futuros shocks externos.
A largo plazo, el informe recomienda ampliar la base del impuesto a la renta personal y simplificar la estructura del impuesto al valor agregado, como parte de las reformas para garantizar la sostenibilidad fiscal.