Preocuparse de delinear un proyecto de futuro, es la prioridad que debe tener hoy la Concertación. Así al menos lo cree el senador de la Democracia Cristiana (DC), Patricio Walker, quien además plantea que es necesario que el conglomerado necesita un mecanismo de solución de conflictos.
- ¿Cree que la Concertación está agotada o superada?
- La Concertación tiene que reinventarse, tener una propuesta de futuro, porque la gente no vota por lo que se hizo los últimos 20 años, sino por cuál es la propuesta de futuro. En eso creo que tenemos que actualizar nuestra propuesta, pero no soy de aquellos que dicen que hay que eliminar la Concertación, al contrario, hay que rejuvenecerla, revitalizarla y eso significa potenciarla y no debilitarla.
- ¿Qué le parece la propuesta de José Antonio Gómez de cambiarle el nombre a la Concertación?
- Eso es un tema accesorio. Lo fundamental es cuál va a ser nuestro proyecto, cuáles son las ideas y las propuestas. El tema del nombre no es tan importante, algunos quisieron cambiarle el nombre al Transantiago, pero las cosas son lo que son y no lo que se dice que son.
- ¿Se debe ampliar la Concertación y hacia dónde?
- Se puede ampliar en la medida que existan fuerzas convergentes, leales, que estén dispuestas a trabajar en equipo. Porque si algunos que quieren participar en la Concertación se dedican a descalificarnos, a tratarnos mal, a decir que somos conservadores, que somos una especie de dinosaurios es difícil ampliarse a ellos. Entonces, todos los que quieran trabajar con nosotros, ampliar la Concertación, pero sobre la base de ser leales, de actuar en torno a programas comunes; bienvenido sea, pero tiene que haber una actitud constructiva de ambas partes. Para bailar tango se requieren dos.
Resentimiento
- Los ánimos en la Concertación quedaron resentidos post reforma educacional, ¿cómo se reestablecen las confianzas en el conglomerado?
- Hubo un acuerdo de todos los partidos de la Concertación y que lamentablemente algunos no compartían y tuvieron un voto distinto a la mayoría. Pero creo que no podemos inhibirnos porque algunos parlamentarios no compartan los acuerdos, sobre todo, cuando los partidos y las bancadas apoyaron el acuerdo y, por lo tanto, no podemos autocensurarnos o limitarnos porque uno, dos o tres parlamentarios van a votar de una manera distinta, sino no podríamos llegar a ningún acuerdo en ninguna materia. El senador José Antonio Gómez estuvo en todas las conversaciones y él sabe cómo ocurrieron las cosas, así que la responsabilidad no es de la mayoría de la Concertación, sino que de aquellos que tuvieron una postura distinta, que es respetable.
- ¿Cómo se restablecen los lazos?-
En la medida que todos estemos dispuestos a no transformar los triunfos en derrotas y que estemos dispuestos a actuar en equipo. Porque creo que las declaraciones del senador Gómez son muy respetables, pero no le hacen bien a la Concertación.
- ¿En la Concertación falta un sistema de resolución de conflictos?
- Sí. Creo que hay que hacer un reglamento como el que tenemos en la Democracia Cristiana, este consiste por ejemplo cuando un senador tiene problemas de conciencia o no está de acuerdo con un proyecto de ley avisa antes al jefe de bancada y queda liberado de votar y creo que eso podría recogerse como reglamento para la Concertación.