La comisión de expertos para analizar la nueva institucionalidad en materia de inversión extranjera entregó ayer su informe a la presidenta de la República, Michelle Bachelet.
En 19 páginas, quedó patente las diferencias entre los 15 comisionados respecto a los mecanismos para atraer inversión extranjera y que reemplacen al Decreto Ley (DL), 600, que se derogará a partir de 2016.
Las discrepancias surgieron respecto a la posibilidad de que los inversionistas extranjeros gocen de invariabilidad tributaria y certeza jurídica al firmar contratos de inversión con el Estado chileno.
Estos puntos son abordados por los comisionados Rafael Aldunate y Carolina Fuensalida.
Rafael Aldunate, economista y director de empresas: "No hay que apostar todas las fichas por la nueva agencia"
-¿Comparte las recomendaciones de la comisión de expertos?
- No hubo una votación, ni se zanjó vía una posición mayoritaria, se buscó un grado de consenso y de buenas prácticas de interiorización, donde cada uno aportó sus puntos de vista. Quiero decir que la comisión no tuvo un mandato, sino que recogió visiones de los distintos miembros. Si llega al Congreso lo que el Ejecutivo presente como propuesta, va a tener bastante cintura por donde moverse, por cuanto no hay una opinión única en la comisión, sólo se buscó un marco general de consenso.
-¿Ve adecuado que se reconozca la necesidad de un nuevo estatuto?
- No hay ningún estímulo relevante, todos estamos de acuerdo en que la inversión extranjera es positiva para el país y como consecuencia implica que el país debe promoverla, pero no vemos ningún estímulo en particular ni tampoco resguardo.
Nosotros lo que estábamos buscando más que la invariabilidad tributaria, es una estabilidad tributaria, si se suman los dos cambios que hubo en la administración Piñera, más la última reforma tributaria, ya tenemos tres componentes de aumentos de impuestos corporativos en menos de cinco años. Entonces lo que queríamos en el fondo era dar incentivos de estabilidad, si no era la invariabilidad.
- Pero en el debate de la invariabilidad, ¿cuál de las cuatro fórmulas apoyó'
- Estuve a favor de la tercera fórmula, que fuera para todos los sectores, con elementos de modernidad respecto a la no discriminación (...) Se puede avanzar en una invariabilidad moderna, con un menor plazo, mayores montos y sintonizarla con el mercado. Una opción era ponerle como base la tasa de impuestos de hoy, también había que afirmar el principio de no discriminación, porque si mañana aparece un impuesto a la minería se puede plantear que es discriminatorio, ya que no afecta a todos los sectores.
-¿Comparte que la institucionalidad del país es un garante para el capital?
- La esencia de este informe es que más que un reglamento o estatuto con garantías, lo que se está apostando es que la macroeconomía de Chile va a ser el estimulador y el resguardo de la inversión extranjera. Al no haber ningún estímulo, se está apostando a la madurez y respeto de la institucionalidad. De todos modos, se va a generar un marco jurídico que respalda y repita lo mismo que se aprobó en los distintos tratados comerciales soberanos y en acuerdos de doble tributación.
-¿La creación de una agencia es un incentivo potente para los capitales foráneos?
- Soy partidario de la agencia, es un signo de modernidad, la idea es que sea coordinadora, con recursos y haga un seguimiento de las inversiones. En ese punto todos estuvimos de acuerdo. Pero no hay que apostar todas las fichas por la nueva agencia, Chile sin tener una agencia fue el país donde más ingresó inversión extranjera respecto del tamaño de su PIB en la región y entre los tres países del mundo en las últimas décadas. Los empresarios tienen radares propios, el mercado sabe sintonizarse y encontrar los proyectos de mayor fuerza.
Carolina Fuensalida apunta a falta de certidumbre jurídica: "Las conclusiones ofrecen más dudas que certezas"
-¿Con qué sensación quedó tras el informe publicado ayer?
- Fue una comisión bastante transversal, donde se trabajó con bastante seriedad y mucha armonía, con mucho respeto de las posiciones divergentes. Yo tenía una visión distinta y concuerdo con algunos comisionados en que hay que hacer política pública de largo plazo y sin mirar la contingencia, pero en este minuto en particular me parece que hay que mirar la economía con mucha responsabilidad y ver lo que está sucediendo hoy.
-¿Hoy no es el momento adecuado para derogar el DL 600?
- Hay algo que no entendí ahora, ni cuando se discutió la reforma tributaria: ¿por qué existe una necesidad imperiosa de derogar el DL 600? Ha sido una herramienta exitosa que funciona, que es bien mirada a nivel internacional. Entonces de verdad nunca encontré la explicación ni tampoco la obtuve ahora. Ese es un tema muy relevante.
-El gobierno insiste que están las condiciones institucionales para que Chile atraiga inversión sin DL 600.
- No estaban dadas las condiciones hoy en este momento para modificar el DL 600. Las señales están siendo definitivamente erráticas en este sentido y me preocupa que cuando se habla de una alianza público privada, justamente vamos en el sentido contrario al privar y eliminar garantías que hoy existían y funcionaban en forma adecuada.
-La comisión tampoco cerró con acuerdo respecto a la certeza jurídica para los inversionistas extranjeros.
- Desde mi mirada más académica, al mirar lo que es el DL 600 hay que ofrecer una institucionalidad completa, profunda e integral. Había que empezar a ver lo que había para luego proponer algo nuevo. Dicho esto, siento que lo que terminamos ofreciendo -al menos en el informe- es bien poquito y muy dubitativo.
Pareciera ser que lo único donde hubo consenso fue en el acceso al mercado cambiario formal. No hubo consenso en la necesidad de un contrato de ley con el Estado ni en la invariabilidad tributaria. Por lo tanto, cuando uno mira el mandato que teníamos como comisión, creo que ofrecimos muy poco en materia de institucionalidad. Siento que ofrecimos más dudas que certezas, hay muchas más interrogantes y posibles alternativas.
-¿Es preocupante la falta de consenso en la comisión de expertos?
-Me preocupa que cuando miro lo que ha sido Chile queriendo ser una plataforma de inversiones, uno evidentemente tiene que ofrecer cosas distintas y ventajas competitivas respecto al resto de los países.
Siento que es una pérdida el no ofrecer la certeza jurídica que, por ejemplo, tenía un contrato de ley con el Estado. Eso era intocable para ambas partes. Si no se acoge nuestra posición de minoría, no sé si existirá la posibilidad de mantener las reglas del juego para un inversionista que venga a Chile por proyectos de largo aliento, porque no quedó recogido con certeza.
Quedaron más bien planteamientos y dudas, pero no certezas. Yo era partidaria de una nueva institucionalidad más moderna, pero tengo esperanzas de que todo esto se incluya en el proyecto de ley.