Hace años que no se llevaba a cabo una junta de accionistas tan tensa como la de ayer. Y es que en un mercado "flojo" en términos de grandes operaciones, el hecho de que ayer el controlador de Iansa, ED&F Man Sugar -asesorado por BTG Pactual- haya tenido que salir a negociar, hasta último minuto con los accionistas minoritarios -liderados por AFP Habitat-, para salvar el paso previo a la OPA, volvió a darle emoción a estas juntas.
Todo partió, de hecho, con el pie izquierdo. La reunión comenzó con un atraso de 45 minutos -puesto que Alejandro Montero y Juan Guillermo Agüero, de BTG, estaban reunidos con su par de AFP Habitat-, y no fue posible conseguir, en una primera votación, el quórum necesario para cambiar los estatutos. Su importancia radica en que éstos fijan en un máximo de 55% la concentración de la propiedad, y sólo así se pueden hacer viables los planes de la británica de quedarse con el 100% de los títulos.
Desde un comienzo las posiciones se veían irreconciliables, ya que Habitat pedía que se pagara $ 40 por acción (contra los $ 26,6 que se ofreció hace unos días).
Justo antes de comenzar la junta, llegaron el presidente de Iansa, Joaquín Noguera, y el gerente general, José Luis Irarrázaval, quienes tras esperar algunos minutos y pedir un par de veces el quórum de asistencia, dieron inicio a la reunión, con la presencia de 95,751% de las acciones de la compañía, participación "inédita", según entendidos.
Para la primera votación se alcanzó una aprobación de 71,86%, mientras que el mínimo era de 75%.
El ambiente se tensó aún más, y era fácil percatarse del nerviosismo de los asistentes y la mesa directiva. Finalmente, el director ejecutivo de Investment Banking de BTG Pactual Chile, Juan Guillermo Agüero, tomó la palabra. "Esta oferta es justa, es atractiva para los accionistas y que en general el mercado ha considerado con un buen premio", señaló, tratando de convencer a los asistentes. Luego propuso un receso para que se realizara una nueva votación.
Así, ambos ejecutivos del banco de inversión se reunieron en una sala con el representante de Habitat, buscando llegar a un acuerdo y salvar la operación.
Según cercanos, finalmente BTG Pactual logró convencer a la administradora, aumentando el precio en 3,01%, hasta los $ 27,4 por acción.
El mismo porcentaje de aumento en la oferta será para Campos Chilenos, la controladora de Iansa, algo que sería voluntario, dijeron entendidos.
Pero también se puso una segunda condición: la reforma a los estatutos sólo entrará en vigencia si es que la OPA resulta exitosa.
La decisión fue comunicada por el representante de Habitat y luego se procedió a la segunda votación. La AFP terminó respaldando la propuesta y finalmente se aprobó la modificación de los estatutos, con un 84,3% a favor y 1,72% en contra.
Las dudas de los minoritarios
Tras el cómputo de la nueva votación hubo algunos -pocos- aplausos, mientras que al término de la junta, otros accionistas tomaron la palabra para exponer sus inquietudes respecto a los efectos de esta OPA.
Sobre el desliste de la bolsa de la compañía, explicaron que no era una alternativa porque actualmente tiene 14 mil accionistas, y para la salida se requieren menos de 500.
Otros señalaron sus aprensiones respecto a la forma en que se consiguió la aprobación, ya que no se pidió el respaldo de nadie para el segundo llamado a votación, postura que fue apoyada por un grupo minoritario de los asistentes que aplaudieron la intervención.
"Se le está entregando en bandeja una empresa a un controlador en un momento en que estamos en un ciclo de baja del precio del azúcar", expuso un accionista, quien criticó además que la modificación al resultado fuera impulsado por una AFP (Habitat).
