El planeta actualmente es hogar para siete mil millones de personas y, según datos de la ONU, al año 2050 habrá 9 mil millones, hecho que plantea desafíos clave no sólo para los gobiernos sino también para las empresas que quieran satisfacer las necesidades de esa población, de manera sustentable. Específicamente, el crecimiento demográfico implica producir más y mejores alimentos; reducir la dependencia de los combutibles fósiles, potenciando el desarrollo de energía alternativa (como los biocombustibles); y proteger a las personas y al medio ambiente.
Esas tres grandes tendencias son las bases sobre las que se sustenta el crecimiento y que guían el accionar de DuPont, empresa fundada en 1802 en Estados Unidos por el inmigrante francés Eleuthère Irénée du Pont, y que hoy se enfoca en tres áreas de innovación: agricultura y nutrición; biotecnología industrial; y materiales avanzados.
Victoria Brady, directora de Tecnología e Innovación de DuPont para América Latina, acota que en 2011 la compañía, que cuenta con 70 mil empleados a nivel mundial, tuvo ventas por US$ 38 mil millones e invirtió
US$ 2 mil millones en I+D. De eso, el 65% se destina a la megatendencia Alimentación, 13% a Energía; y 11% a Protección. “Además, somos un apoyo importante para que nuestros clientes realicen I+D, lo que no se contabiliza dentro de esta inversión”, dice Brady.
Y este punto es crucial a la hora de entender el crecimiento de la compañía: la ejecutiva plantea que “no hubiéramos sobrevivido 200 años sin oír al mercado. Creemos que se desarrollan mejores productos en la medida que ‘escuchamos’ las necesidades de los mercados en los que queremos crecer”.
En ese sentido, la empresa entiende el trabajo colaborativo con sus clientes, universidades, gobiernos, socios y personas naturales como fundamental para generar productos que realmente satisfagan las necesidades. En esa línea, cuenta con 150 centros de I+D en el mundo (19 en Latinoamérica) y desde 2011 está profundizando esta sinergia con los centros de innovación de Corea del Sur, Taiwán, Tailandia, India, México y Brasil.
“Queremos atraer las capacidades de nuestros 9.500 científicos hacia las realidades locales, y que no sólo ellos oigan la voz del mercado, sino que también el mercado escuche lo que hacemos”, explica Brady.