El grupo Luksic enfrenta un nuevo revés en su proyecto minero en Pakistán. El gobierno de la provincia paquistaní de Baluchistán entregó una serie de objeciones a la petición de licencia de explotación minera que fue solicitada por la sociedad compuesta por Antofagasta Minerals y Barrick Gold -Tethyan Cooper Co (TCC)- y que controla el 75% del proyecto Reko Diq. La solicitud de la licencia fue realizada en febrero pasado.
Aunque no se explicó en detalle las objeciones de Baluchistán, trascendió que envuelven una serie de peticiones formales e informales, las cuales deberán ser analizadas y respondidas por la sociedad en un plazo de 30 días corridos, desde que fueron notificados, lo que corresponde al próximo 22 de octubre.
El Vicepresidente de Asuntos Corporativos de Antofagasta Minerals, Francisco Veloso aseguró que “TCC ha indicado su interés en trabajar con el gobierno de Baluchistán para seguir adelante con el proceso de concesión de la licencia de explotación minera”.
Es preciso recordar que en junio pasado la Corte Suprema resolvió facultar al gobierno de Baluchistán para que aprobara la licencia del yacimiento de oro y cobre que tiene recursos estimados de 5.900 millones de toneladas con leyes promedio de cobre de 0,41%.
También hay que mencionar que el gobierno de Baluchistán ha manifestado en el pasado su interés de desarrollar la iniciativa por sus propios medios, lo que podría estar detrás del procedimiento seguido.
Optimismo
Fuentes de las empresas que conforman la sociedad que operará el proyecto, aseguran que esto no es un traspié en la tramitación sino que se trataría de un proceso más. Por este motivo es que no se quieren anticipar a un eventual rechazo, lo que complicaría el proceso y los llevaría a recurrir a una instancia judicial.
Las empresas indicaron además que el listado de objeciones planteadas tienen que ver con formalidades de plazos o procedimientos y no con cuestiones relativas a temas técnicos de la iniciativa.
A comienzos de septiembre, el gerente de comunicaciones de Barrick en Canadá, Andy Lloyd, adelantó que la licencia del proyecto “podría incluir condiciones adicionales al proyecto, lo cual podría llevar a discusiones posteriores con el gobierno. Pero en esta etapa, estamos a la espera de dicha decisión”.
En Antofagasta Minerals, que posee el 50% de la sociedad TCC, se mostraron cautos frente a la situación, pues consideran que esto no puede ser mirado como un rechazo a la iniciativa -que contempla en torno a US$ 3.300 millones de inversión- porque aún falta la entrega de sus respuestas a la autoridad.