La canciller alemana, Angela Merkel, defendió hoy el debate
abierto sobre la posible creación de un Fondo Monetario Europeo para ayudar a
socios en dificultades, y consideró que ello exigiría reformar los tratados
vigentes de la Unión Europea (UE), entre ellos el de Maastricht.
"Necesitamos capacidad de acción", dijo la canciller durante un
encuentro con los medios internacionales acreditados en Berlín, en el que
subrayó que "los instrumentos actuales no son suficientes para afrontar la
situación" ni para evitar crisis similares en el futuro.
Por su parte, el economista jefe del Banco Central Europeo
(BCE), Jürgen Stark, rechaza categóricamente esta posibilidad, ya que considera
que sería incompatible con la Unión Monetaria, crearía un estímulo falso y
dañaría los países con finanzas públicas sólidas.
Un Fondo Monetario Europeo "minaría la aceptación
pública del euro y de la Unión Europea", advirtió Stark, miembro del
comité ejecutivo del BCE.
En
tanto, el presidente del Banco Central Europeo (BCE) y portavoz del G-10,
Jean-Claude Trichet, ha sido m{as cauteloso y dijo hoy que los gobernadores de los bancos centrales del G-10, reunidos hoy, no discutieron sobre la necesidad o conveniencia de crear un Fondo Monetario
Internacional (FMI) para la zona del euro.