Estados Unidos alertó hoy a sus socios del G20 del
riesgo de recortar los déficits de forma demasiado rápida e insistió en que la
recuperación económica debe estar por delante de los recortes presupuestarios.
"Debemos de demostrar un compromiso con la reducción del déficit a largo
plazo pero no a costa del crecimiento a corto plazo", señalaron hoy en una
carta publicada en el diario The Wall Street Journal el secretario del Tesoro,
Timothy Geithner y el asesor económico de la Casa Blanca Lawrence Summers.
La misiva coincide con la publicada también hoy por el presidente de la
Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y el presidente del Consejo
Europeo, Herman Van Rompuy, en la que, a diferencia de sus colegas en
Washington, abogan por la austeridad fiscal.
Barroso y Rompuy insisten en su carta en la necesidad de una "sustancial
consolidación" fiscal que, dicen, debería de empezar como muy tarde en el
año 2011 y que debería de ir acompañada de reformas estructurales para impulsar
el crecimiento.
Ambos líderes reconocen, de todos modos, que la receta no puede ser igual para
todos e insisten en que la cumbre del G20 que se celebrará este fin de semana
en Toronto (Canadá) "debería acordar una estrategia de salida coordinada y
diferenciada para asegurar unas finanzas públicas sostenibles".
Las diferencias transatlánticas en torno a los estímulos económicos prometen convertirse
en uno de los temas centrales de la reunión del G20.