La agencia de medición de riesgos
Fitch
advirtió hoy de que la publicación el viernes de las pruebas de
solvencia realizadas a 91 bancos europeos puede dificultar el acceso
a la financiamiento en los mercados mayoristas de aquellas entidades
que más lo necesiten.
En un comunicado, los analistas de Fitch
reconocen su
preocupación por la posibilidad de que las condiciones al financiamiento sigan siendo "difíciles" para algunas entidades, lo que
aumentará la presión sobre las calificaciones crediticias asignados
por la agencia, es decir, una posible rebaja de las mismas.
Ello a
pesar de que los gobiernos europeos pondrán capital a
disposición de aquellas entidades que reflejen carencias en los
denominados "stress test", dice Fitch.
En esas pruebas se hace
una estimación de la resistencia de las
principales entidades financieras en un escenario de aumento del
paro, la inflación, y en el que el crecimiento de la economía fuera
3 puntos porcentuales menor de lo previsto por la Comisión Europea.
No
obstante, Fitch recuerda que hay poca información sobre los
supuestos utilizados en esas pruebas, aunque piensa que se basarán
en los mismos que otras realizadas ya por reguladores nacionales,
que fueron rigurosas, por lo general.
Fitch cree que la
publicación de las pruebas contribuirá a
remediar la falta de información existente y señala que cuando la
Reserva Federal de Estados Unidos midió la solvencia de diecinueve
grupos bancarios, la pérdida media esperada era del 7,5% de los activos ponderados por riesgo.
Sin embargo, matiza que en
esa media había una "amplia
dispersión", que iba desde unas necesidades de capital entre el 3 y
el 11,8% de los activos ponderados por riesgo, una "gran oscilación"
que augura, puede darse también en Europa.
Esta gran oscilación
dependerá de la composición de la cartera
del banco, del punto que ocupa el país en el ciclo económico y de la
contabilización que se haya hecho de las pérdidas de su sistema
financiero.
La mayoría de los grandes grupos bancarios europeos
"deberían
poder resistir esta pérdida media y superar el listón del 6 por
ciento del Tier 1 para finales de 2011, incluso si se tienen en
cuenta dos años de beneficios operativos antes de provisiones por
deterioro de activos.
Fitch califica a 82 bancos de los sometidos
a la prueba de
solvencia con activos totales ponderados por riesgo de casi 11
billones de euros.
De ellos, veintiocho bancos tendrían 4,4
billones de euros en
activos ponderados por riesgo y Fitch los tendría entre las
entidades a las que no espera rebajar su calificación.