El último trimestre de 2013 dio cuenta de un precedente que ha despertado preocupación entre los economistas y autoridades. El recorte en la estimación de crecimiento de la Formación Bruta de Capital Fijo (FBCF) para 2014 por parte del Banco Central desde el Informe de Política Monetaria (IPoM) de septiembre, que lo situó en 4,5%, al IPoM de diciembre, que lo redujo a un 4,1%, va de la mano con la desaceleración económica que ha comenzado a experimentar la economía chilena y que, según las estimaciones de los expertos, debiera agudizarse en el IPoM de marzo.
Es más, economistas plantean que la inversión puede caer a niveles cercanos al 3%, lo que presionaría al nuevo gobierno para tomar medidas que permitan revertir esta situación.
Para el economista de la Universidad de Chile, Alejandro Alarcón, “lo que hemos observado estadísticamente es que hemos tenido un crecimiento muy bajo de la inversión, después de que habíamos tenido un período largo en el que habíamos tenido crecimientos importantes con cifras de dos dígitos en algunos casos, pero debido a que se está desacelerando el ciclo económico de forma más pronunciada a lo esperado, el tema de la inversión está concatenado al sistema estructural”.
Esta visión la comparte el economista de Libertad y Desarrollo (LyD) Francisco Klapp, que advierte que los pronósticos para el próximo IPoM “serán bastante menores a los actuales”.
Agrega que “el porcentaje de crecimiento de la inversión creo que estará bajo el 4%, va a ser un número más bajo dado los indicadores que estamos viendo hoy”.
Y es que tal como se ha señalado en varias oportunidades la falta de reformas estructurales en la economía chilena hacen difícil sortear esta situación. “No se ve ninguna medida que se esté tomando en ese sentido para darle más dinamismo a la inversión (...) El Banco Central ya está tomando un rol bastante activo para enfrentar esta situación, lo que se vio con la tercera rebaja de tasa (en cuatro meses), y es muy probable que veamos una cuarta”.
Pero son varios los factores en los que hay temas pendientes. Entre ellos se cuentan los siguientes:
Energía El mercado y el sector privado ha planteado que es esencial resolver los elevados costos energéticos que enfrenta actualmente el país. Esta es una de las causas que identifican los economistas y que están poniendo un freno a la inversión. “Los dos sectores más importante que invierten en este país son la industria y la minería, y están sufriendo por el alto costo de energía. Hay un tremendo impacto por la reforma estructural que no se hizo, y esto le está pasando la cuenta a la inversión en Chile” afirma Alarcón. A su juicio, Chile se debe tomar “en serio” el tema de la energía; de lo contrario, la inversión va a estar acotada para siempre.
Construcción Otra variable que da cuenta del freno que evidencia la inversión es el lento dinamismo de la construcción. De hecho, los pedidos de materiales han anotado bajas que reflejan que la inversión está deprimiendo. “Los despachos de cemento a fines del año pasado cayeron abruptamente, las importaciones de bienes de capital también vienen a la baja (...) Es difícil que una caída se revierta de manera importante durante el resto del año, por lo que éste va a ser un mal año para el desempeño de la inversión”, asegura Sebastián Cerda, director ejecutivo de CorpResearch.
Incertidumbre tributaria A juicio de Cerda, otro de los factores que impacta en el crecimiento de la inversión es la incertidumbre tributaria que ha generado el anuncio de reforma de la presidenta electa, Michelle Bachelet. Según el economista, este hecho “es algo que no se puede desconocer, la reforma que se anunció ha generado una preocupación adicional, y es que el alza de impuestos le va a pegar fuerte a la rentabilidad de las empresas”.
Consumo Finalmente, otro factor afectado por la desaceleración de la economía es el consumo. Así lo plantea Klapp que advierte que este factor “ha sido el motor de nuestra economía en los últimos años y lo preocupante es que la demanda interna empieza poco a poco a dar señales de debilitamiento”.
Esta situación responde en gran medida, explica, a que el mercado laboral está dando señales de mayores holguras, principalmente en los niveles de creación de nuevos puestos de trabajo y en los niveles de contratación.
Rol del Banco Central
Con este escenario, los expertos plantan que se genera una presión adicional para el instituto emisor. Klapp plantea que “el Banco Central ya está tomando un rol bastante activo para enfrentar esta situación. El IPoM que viene va a ser más claro que el anterior acerca de la desaceleración que enfrenta la economía”.
Cabe recordar que el rango de crecimiento proyectado por el Banco Central en el informe de diciembre pasado fue de 3,75% a 4,75%, cifra que también debería ser recortada en el IPoM del próximo mes.
Asimismo, Alarcón sostiene que en la coyuntura actual al Banco Central se le genera un dilema, ya que en sus dos últimos comunicados de Reunión de Política Monetaria ha indicado que va a seguir una política monetaria expansiva con tasas de interés más bajas, pero por otro lado, dice Alarcón, la inflación es un riesgo latente en la economía chilena en el mediano y largo plazo.


