El Informe de Estabilidad Financiera (IEF) del primer semestre de 2015, presentado hoy por el Banco Central, en conjunto con el Informe de Política Monetaria (IPoM), señala que los indicadores de la banca se mantienen estables y los ejercicios de tensión dan cuenta que los niveles de capital son suficientes para absorber la materialización de un escenario de estrés severo.
El documento señala que tanto el escenario interno como externo se mantienen respecto del informe previo, aunque, agrega, que la permanencia de condiciones globales de financiamiento muy favorables puede incubar vulnerabilidades que se manifiesten ante una normalizacion de tales condiciones.
Lo anterior tendría un impacto en los mercados financieros globales, en particular en las economías emergentes, cuyas perspectivas de crecimiento se han venido deteriorando.
En definitiva, Chile mantiene una situación de solvencia y liquidez externa adecuada para enfrentar escenarios de estrés financiero internacional. Sin embargo, esta no lo aísla de tales desarrollos y sus efectos, concluye el documento.
Usuarios de Crédito
El informe mantiene la nota de cautela respecto de la situación del sector corporativo, cuyo endeudamiento medido sobre PIB alcanzó a 114% al cierre de 2014. Este incremento proviene principalmente del aumento de la deuda externa y la depreciación del peso.
En tanto, los indicadores de fortaleza financiera de las firmas que reportan a la SVS siguen en niveles similares a los reportados en IEF anteriores, pero inferiores a los promedios históricos. Ello da cuenta de una menor resiliencia del sector ante la posibilidad de un entorno macroecónomico menos favorable, explica el documento.
Mercado inmobiliario
En el mercado inmobiliario residencial, por su parte, la actividad se mantiene dinámica con precios que siguen subiendo. Podrían estar detrás de esta sostenida dinámica, la moderación de los costos de producción y un adelantamiento de compras, previo a la entrada en vivencia de la reforma tributaria. En oficinas, la tasa de vacancia también continúa aumentando.
El informe detalla que mientras los indicadores de precios de viviendas siguen creciendo, se observan algunas moderaciones, particularmente en zonas específicas.
Banca
En relación a la banca, el IEF del primer semestre de 2015, al igual que el anterior, destaca que los indicadores financieros se mantienen estables y los ejercicios de tensión muestran que los niveles de capital son suficientes para absorber la materialización de un escenario de estrés severo.
En esta línea, el crédito comercial y de consumo exhiben tasas de crecimiento acotadas, no así el el hipotecario que sigue dinámico. Además, el comportamiento de la cartera comercial y de consumo está en línea con la menor expansión del gasto privado.
Hogares
Respecto de los hogares, el IEF resalta que los indicadores agregados del sector siguen relativamente estables, pero con algunos de ellos algo más deteriorados en el margen. La deuda sobre ingreso disponible subió en 2014, mientras que la carga financiera siguió en torno a 14% del ingreso, por los bajos niveles de las tasas de interés.
No se aprecian cambios en los indicadores de no pago bancarios, mientras que para oferentes no bancarios se observa un nuevo incremento.
Escenario externo
Respecto al escenario internacional, el informe sostiene que la política monetaria de los países desarrollados continúa siendo expansiva , manteniendo en niveles bajos las tasas de interés de largo plazo e incentivando la mayor toma de riesgo. Esto ha presionado a la baja a las tasas largas soberanas, lo que sumado a premios por riesgos que se mantienen acotados, ha generado un ambiente propicio para la mayor emisión de deuda, principalmente por parte de corporativos.
Además, el IEF destaca que las expectativas de crecimiento para las economías emergentes han seguido deteriorándose, entre ellas China Rusia y, particularmente, América Latina, por menores precios de las materias primas y elementos idiosincráticos.
Debido a esto, el informe señala que además del canal real, vínculos comerciales e inversiones directas de empresas chilenas, no pueden descartarse eventos de contagio financiero en precios de activos cómo el tipo de cambio y el EMBI.