Por Cristián Torres Erpel
Por septimo mes consecutivo, el Banco Central mantendría el actual nivel de la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 5%, decisión ya internalizada por el mercado.
Este escenario no se daba desde el 14 de junio de 2011, cuando la entidad decidió subir la tasa en 0,25 puntos porcentuales hasta 5,25%, nivel que mantuvo durante seis meses hasta que en enero del año en curso el ente rector decidió recortar la tasa de interés en 0,25 puntos porcentuales, situación que se mantiene hasta hoy y que al parecer, se prolongaría por algunos meses.
De todas formas, esta mantención no es la más extensa de los últimos años, ya que tras la crisis subprime, el 10 de julio de 2009 se recortó la TPM desde 0,75% hasta 0,50%, nivel que cambió recién el 10 de junio del año siguiente cuando la situación mejoraba y se ubicó en 1%.
Así, según la minuta del ente emisor publicada el martes pasado, “las expectativas del mercado respecto de la TPM anticipan en su gran mayoría, una mantención prolongada de su nivel actual. En las que aún prevén reducciones, su magnitud disminuyó”.
Para el economista jefe de Celfin Capital, Mario Arend, esta mantención prolongada se explica por el “contraste entre lo que está pasando en el frente externo con la economía local”, basado principalmente en un mayor dinamismo interno producto de un mercado que no ha sido afectado por la situación externa, términos de intercambio que se mantienen en altos y un mercado financiero que no ha visto mayores contracciones de liquidez.
A lo anterior, agrega el experto, se suma el contraste que hay entre el precio de los bienes transables que han estado a la baja y el precio de los bienes no transables que han estado al alza. “Hay una clara diferencia en la tendencia entre ambos que se explica por la economía local que continua creciendo y por otro lado, el escenario internacional con una moderación en el crecimiento hace que las presiones de inflación externas sean más bajas”, explica.