Por Claudia Andrea Sánchez
“Tengo tranquilidad y satisfacción. Siempre estaré dispuesto a colaborar con la justicia que es parte de la función de todo ciudadano, pero principalmente de alguien que se ha formado en el derecho como yo”. Con estas palabras, el ministro de Justicia, Teodoro Ribera dio por superado el conflicto en que se vio involucrado luego que se lo vinculara a eventuales sobornos cuando fue rector de la Universidad Autónoma (UA) y por su cercanía con el ex presidente de la Comisión Nacional de Acreditación (CNA), Eugenio Díaz, quien está actualmente procesado. Agregó que su vínculo con Díaz deriva solamente del mundo académico y que la contratación que se le hiciera para asesorar a Gendarmería se debió a que contaba con la experiencia que se requería para las tareas encomendadas.
Ribera fue ayer dos veces a La Moneda: en la mañana a entregar la cuenta pública de su cartera, la que se vio empañada por este caso y luego en la tarde fue citado por el propio presidente Sebastián Piñera para una reunión bilateral junto a la subsecretaria de la cartera, Patricia Pérez. Con esta citación se clarificaron los rumores que circulaban en palacio ante una eventual renuncia del titular de Justicia.
No obstante, esta reunión se produjo luego que el ministro del Interior, Andrés Chadwick le diera su respaldo de manera pública.
“El ministro Ribera cuenta con la confianza del Presidente de la República” y agregó que “el ministro de Justicia goza, como todos los ministros de Estado, de la confianza del mandatario”. El jefe de Gabinete precisó que “el ministro Ribera no ha tenido ninguna actuación irregular o por implicancia y lo único que quiere es que esto se aclare”.
Sorpresa del ministro
En la tarde y tras el encuentro con el mandatario, el secretario de Estado agradeció al ministro del Interior, Andrés Chadwick, “por sus palabras de aliento en un momento en que nadie le gusta estar viviendo”.
En cuanto a si se sentía respaldado por el jefe Estado, el ministro Ribera dijo que “la expresión más pública la ha dado el ministro Chadwick, quien me dio apoyo y solidaridad”. Destacó que “es muy interesante que se convoque una comisión investigadora para ver lo que sucedió porque no puede radicarse toda la responsabilidad en una sola persona”.
En la mañana, el ministro de Justicia se había mostrado arrepentido por “no haber tenido más sensibilidad, pero me era imposible saber, en ese momento, que una persona que representaba la fe pública y la credibilidad en materia académica y que tenía el pergamino, además de ser parte del Instituto Nacional de Derechos Humanos, pudiera ahora estar involucrado en lo que se le imputa”.
Luego añadió que “a mí me sorprende, porque la CNA está integrada por muchas personas, entonces, él puede haber tenido situaciones de relaciones con entidades, pero había muchos; ese no es un tema que me corresponde... La política es dura pero eso no significa que no duela”.