La Constructora Armas -sociedad ligada al grupo homónimo- solicitó a sus acreedores modificar su acuerdo de reorganización judicial (ARJ). Dijo que “la evolución económica y sectorial en 2024 y 2025 ha sido menos favorable de lo previsto”, afectando directamente los plazos de la generación de los flujos proyectados para cumplir con el plan de pago vigente.
El tribunal que lleva el proceso ya fijó fecha para la realización de una junta extraordinaria de acreedores para que estos voten la propuesta de la compañía: lunes 22 de diciembre de 2025.
La firma propuso, entre otras materias, modificar el calendario aplicable a ciertos acreedores proveedores y a los bancos por créditos sin garantía estatal, en el sentido de prorrogar el vencimiento de las cuotas de amortización de capital y pago de intereses, en un año respecto del actual vencimiento.
Los flujos
A fines del año pasado, la compañía solicitó su reorganización judicial para evitar su quiebra, informando pasivos por unos US$ 21 millones. Dijo que la principal causa que desencadenó sus problemas financieros fue la pandemia del Covid-19 de 2020.
“Constructora Armas SpA ha cumplido íntegramente las obligaciones asumidas en el contexto del acuerdo de reorganización judicial, tanto en el ámbito laboral como tributario y comercial. Ha administrado fielmente los recursos de acuerdo los controles y supervisión establecidos en el Acuerdo”, dijo la firma en su reciente solicitud de modificación del plan de reorganización, asesorada por el estudio de abogados liderado por Luis Felipe Castañeda.
Luego, la compañía se refirió a los “motivos que justifican” su solicitud: “La evolución económica y sectorial durante 2024 y 2025 ha sido menos favorable de lo previsto al momento de aprobarse el acuerdo, afectando directamente los plazos de la generación de los flujos proyectados para recuperación por venta de stock disponibles de proyectos”.
Junto a esto, dijo que el encarecimiento del crédito hipotecario, la reducción en la capacidad de endeudamiento de las familias y la mayor exigencia de pie y antecedentes crediticios por parte de los bancos han limitado significativamente la materialización de promesas de compraventa en escrituras, postergando -aseguró- la percepción efectiva de ingresos por parte de las inmobiliarias y, en consecuencia, los excedentes destinados al cumplimiento del acuerdo.
No obstante, aseguró que las condiciones actuales muestran una recuperación gradual del mercado de viviendas con entrega inmediata.
“El stock disponible y las velocidades de venta más estables y seguras, derivadas de contar con unidades ya recepcionadas o próximas a entrega, permiten prever un escenario progresivamente favorable, en el que la empresa deudora podrá liquidar sus obligaciones bancarias y comenzar a percibir excedentes significativos durante el segundo semestre de 2026, que le permitirá continuar con el pago a sus acreedores”, dijo la compañía, para luego insistir que la propuesta de modificación del ARJ busca ajustar los plazos “a la nueva realidad del mercado y asegurar el cumplimiento íntegro del plan en beneficio de todos los acreedores pendientes de pago”.
La gestión
La compañía detalló que, en términos organizacionales, la dotación y gastos en personal bajó “sustancialmente” en línea con el término de ejecución de las obras, y que se adecuó la estructura para la prestación de servicios de post venta, como única obligación pendiente de la ejecución de los proyectos.
Además, señaló que el Grupo Armas durante el último año “ha realizado un esfuerzo significativo y constante” en la disminución de sus costos operacionales, a través de la racionalización de sistemas operativos y ajustes de sus equipos en todos sus niveles.
En este contexto, destacó el relanzamiento de su gerencia comercial, con una estructura nueva y con la incorporación de profesionales de amplia experiencia en el sector inmobiliario. “Tenemos confianza en que el nuevo equipo de venta será clave en la recuperación de los recursos que permitirán dar cumplimiento a la totalidad de las obligaciones financieras de Constructora Armas con sus acreedores”, estimó la firma.