La búsqueda de nombres para el gabinete que acompañará a partir del 11 de marzo al Presidente electo José Antonio Kast sigue en pleno proceso. Y se estima que sería anunciado la primera quincena de enero.
Cercanos al proceso transmiten que hay una serie de carteras en que ya están afinados los candidatos, mientras que hay otras en que el reclutamiento ha estado más cuesta arriba.
En ese grupo estaría el Ministerio del Trabajo y Previsión Social, que si bien no se plantea como una de las áreas en que se realizarían grandes transformaciones, es relevante para el próximo mandatario, considerando la necesidad de reactivar la creación de empleo asalariado y la implementación -y eventuales ajustes que pudieran surgir- a una serie de normativas, como la reforma de pensiones o aquellas vinculadas a leyes laborales, como todo aquello que tiene que ver con la Dirección del Trabajo (DT).
En ese contexto, uno de los nombres que se ha levantado ha sido el del decano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad San Sebastián, Alejandro Weber. No obstante, cercanos a las tratativas señalaron que si bien el exsubsecretario de Hacienda está colaborando en temas de la instalación con la próxima administración, no estaría actualmente dentro de sus planes asumir el cargo.
Quienes conocen las tratativas señalaron a DF que es altamente probable que en Huérfanos 1273 se instale una mujer.
En ese contexto, hay distintos nombres que se escuchan por estos días, entre ellos el de la directora ejecutiva de Libertad y Desarrollo (LyD), Bettina Horst, aunque la economista también ha sido mencionada en conversaciones respecto de otros roles, como la Dipres.
Otro nombre que comienza a rondar en el entorno de “La Moneda chica” es el de la investigadora de Faro UDD y consejera del Consejo para la Transparencia, Natalia González.
El perfil de la abogada y exintegrante de la comisión experta del segundo proceso constitucional estaría siendo empujado por figuras de la UDI, y su nombre hace sentido en el mundo de Republicanos.
En otros sectores políticos Trabajo también es visto con buenos ojos. Por ejemplo, cercanos a Demócratas transmiten que la senadora Ximena Rincón sería la carta del partido.
Los otros cargos clave
Más allá del próximo ministro o ministra, hay nombres que actualmente están desempeñando un rol crucial en el equipo laboral y no se descarta que ocupen un puesto dentro de la próxima administración, aunque en otros cargos clave.
Es en esta ecuación donde aparecen David Oddó, abogado y profesor de la Facultad de Derecho de la Universidad Católica, y exjefe del Departamento Jurídico y Fiscal de la Dirección del Trabajo.
Oddó, de acuerdo a cercanos, es “la mente” que está afinando y alistando los temas laborales que serán prioridad en la próxima administración: el combate a la informalidad y la revisión a los pronunciamientos de la DT, por ejemplo. Conocedores de las conversaciones no descartan que el 11 de marzo aterrice en la subsecretaria del Trabajo.
Para la DT -que es mencionada como una de las denominadas “balas de plata” que podría usar Kast-, si bien aún no hay definiciones, hay nombres que se sondean, como el de Lilia Jerez, exdirectora del Trabajo en la anterior administración de Sebastián Piñera y socia de GNP Canales.
En su caso, su nombre genera apoyo por su experiencia profesional, conoce el servicio y es reconocida por su preparación técnica.
Con todo, uno de los desafíos más relevantes que deberá enfrentar el Ministerio del Trabajo junto con Hacienda son los lineamientos y coordinación sobre la implementación de la reforma previsional.
Además de que la Ley entrará en los próximos meses en su segundo año de puesta en marcha y que trae consigo una serie de hitos y desafíos trascendentales, la próxima administración deberá definir el rumbo que tomará la implementación. En concreto, si sigue su curso tal y como está o si se introducen cambios, vía administrativa o por ley, y de qué envergadura serían esas modificaciones.
En ese contexto, una de las primeras determinaciones que tendrá que tomar el Gobierno de José Antonio Kast tiene que ver con la continuidad del superintendente de Pensiones, Osvaldo Macías, quien ha liderado el regulador en las últimas tres administraciones (Bachelet II, Piñera II y Boric) y que en febrero próximo cumplirá 10 años en el cargo.
Distintas fuentes señalan que en el caso de Macías se estaría evaluando ocupar una bala de plata para interrumpir su continuidad, aunque las mismas fuentes transmiten que es clave encontrar un nombre que pueda reemplazarlo y enfrentar correctamente un proceso de puesta en marcha de reforma que se torna cada vez más desafiante, especialmente para el regulador.