El índice de precios de consumo (IPC) de Estados Unidos subió un 0,1% en octubre y ha aumentado un 2,2% en un año, informó hoy el Departamento de Trabajo.
De este modo, el indicador se situó en línea con las expectativas del mercado.
Si se excluyen los precios de alimentos y energía, que son los más volátiles, la inflación subyacente en el IPC de octubre fue del 0,2%, y ha sido del 2% en un año.
En octubre el rubro de vivienda registró su mayor alza en más de cuatro años, mientras que el precio de la gasolina cayó.
Aunque el ritmo de inflación en octubre fue el más alto en tres meses, el dato confirma que la Reserva Federal tiene margen para continuar con su política monetaria que mantiene las tasas de interés en niveles históricamente bajos mientras la institución sigue inyectando dinero en el sistema.
El informe de hoy muestra que el costo de la energía bajó un 0,2% desde septiembre a octubre y esto ha ayudado a que los trabajadores recuperen algo del poder adquisitivo perdido a lo largo del año cuando los salarios reales se estancaron.
Las remuneraciones horarias promedio, ajustadas por inflación, bajaron un 0,2% en octubre después de una caída del 0,3 % el mes anterior. En los últimos doce meses la remuneración horaria real ha descendido un 0,7%.
El informe del IPC mostró que en octubre los precios de los alimentos subieron un 0,2%.