El secretario del Tesoro estadounidense, Timothy Geithner, aseguró que el
plan de rescate al sector financiero está llegando a su fin. El funcionario confesó
que "nada me hará más feliz" que dar por cerrado el programa ayudó a la banca.
En una intervención en el Congreso, Geithner reconoció que están "llegando
ya al punto en que el programa tiene que ir finalizando". Éste fue
aprobado a finales del año pasado por el anterior Gobierno de Estados Unidos con
el objeto de inyectar capital a las entidades financieras cuya solvencia estaba
en peligro.
Aunque Geithner, pretende acabar prontamente con el plan, insistió que sería peligroso precipitarse,
ya que podría estrangular el crédito y abortar la incipiente recuperación
económica.
La fecha de caducidad de las ayudas está estipulada a finales de este año,
pero algunos legisladores desean que se prolonguen hasta el próximo año, para
apuntalar la recuperación.
En los próximos días, el máximo responsable económico del gobierno de Barack
Obama trabajará en diseñar la finalización de este programa, aunque esto no
quiere decir que se produzca a final de año, como está programado inicialmente.