El ex presidente de la Reserva Federal (Fed) de EE.UU., Alan Greenspan, aseguró hoy que los bancos estadounidenses necesitan una inyección de capital superior a US$ 850.000 millones previsto en el plan de rescate financiero diseñado por la anterior administración Bush.
El predecesor de Ben Bernanke al frente del banco central aseguró hoy que las entidades financieras bancarias de Estados Unidos necesitarán una cantidad de dinero superior a la citada para poder recomponer sus fondos propios y poder prestar dinero.
Greenspan apuntó que "el mercado reclama un margen de fondos propios de entre 13% y 14%, frente al 10% actual". El ex presidente de la Fed justificó este razonamiento en las diferencias de tasas que existe actualmente en los mercados por los bancos.
Además, acusó al presidente Barack Obama de no agilizar la llegada de nuevas ayudas de capital a los bancos para que éstos puedan empezar a prestar dinero. Para el ex timonel de la Fed, el plan de rescate financiero puesto en marcha por la anterior administración Bush se ha interrumpido con la llegada del líder demócrata a a Casa Blanca.
"Desde mediados de enero, en ausencia de nuevas inversiones del Tesoro estadounidense (al capital de los bancos), la mejora se interrumpió", apuntó. En este sentido, Greenspan considera que "el reinicio de una actividad normal de préstamos de los bancos necesitará una importante inyección de capitales de fuentes privadas y públicas".
Según sus cálculos, los bancos deberán depreciar otros US$ 500.000 millones de sus balances y encontrar el dinero para reforzar sus niveles de fondos propios, lo que eleva la necesidad de financiación a más de US$ 850.000.