Los representantes de la industria aérea
reunidos desde hoy en Ginebra en la cumbre sobre "Aviación y
Medioambiente" han coincidido en ensalzar el papel del
biocombustible para que en 2050 las emisiones de carbono del sector
se reduzcan a la mitad del nivel que estaban en 2005.
"Nuestra principal oportunidad es el biocombustible sostenible",
destacó Paul Steele, director ejecutivo del Grupo de Acción del
Transporte Aéreo (ATAG), y organizador de este encuentro que se
clausurará mañana.
En esta línea opinó el secretario general de la Asociación
Europea de Industrias Aeroespaciales y de Defensa (ASD), François
Gayet, quien declaró a Efe que "el biocombustible ha demostrado que
puede funcionar, y desde 2011 ya podría usarse".
"Ahora el reto es ver como se podría aplicar. Ya está disponible,
pero el problema es que hacen falta grandes inversiones para
aplicarlo a gran escala", resaltó Gayet, al mismo tiempo que alabó
que este carburante pueda elaborarse localmente de forma sencilla.
Sin embargo, las reducción de emisiones respecto al nivel de 2005
no llegará hasta 2040, de acuerdo con el secretario general de la
ASD, que justifica tal estancamiento por el aumento del tráfico
aéreo en los próximos 30 años.
En el proceso de aminorar la contaminación del sector, el
director ejecutivo de ATAG también reclamó "apoyo" a los gobiernos,
con medidas como los incentivos fiscales.
Los principales ponentes de la cumbre también coincidieron en que
la reducción de las emisiones de carbono de la industria también
debe lograrse mediante la participación de todos los sectores que
intervienen en la aviación.