Desde París el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, quien participa como vicepresidente de la Reunión Ministerial de la Organización Para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), explicó que la probabilidad de que Grecia salga de la eurozona es cada vez mayor.
"Es difícil decir si Grecia va a salir o no (...) pero lo que los líderes europeos han planteado que van a hacer lo posible para que Grecia no salga, pero aquí se requieren dos para bailar el tango. Debe haber una voluntad de parte de la Unión Europea y de parte de Grecia", expuso el dueño de la billetera fiscal a CNN Chile.
El problema, según el ministro, es que mientras no se produzcan las elecciones en el país heleno, del 17 de junio, no podrán dilucidar quién llevará adelante el nuevo gobierno.
Pese a el despeje de ese punto, Larraín hizo hincapié en que la preocupación no pasa sólo por lo que ocurra con Grecia, sino también con lo que ocurra en su entorno.
"La gran preocupación de hoy no es sólo por la salida de Grecia de la zona del euro, sino que por los efectos que esto puede tener sobre otras economías de la periferia que están complicadas como Portugal e Irlanda, como otras economías más centrales que han experimentado aumentos centrales en el costo de servicio de sus deudas", explicó el secretario de Estado.
"No es una crisis como la de 2009"
En otro aspecto, Larraín aseguró que durante la próxima semana se reunirá el comité de crisis formado el año pasado, para evaluar medidas ante el recrudecimiento de la situación económica mundial.
"Tampoco quiero dar una señal de crisis porque no tenemos una crisis mundial. Tenemos una crisis económica en una zona importante de la economía mundial que es Europa, pero nuestra economía sigue creciendo, vamos a desacelerarnos pero tenemos muchas fortalezas", sostuvo.
Economías como Colombia, Perú, México y Brasil siguen creciendo, "así que no es una crisis como la de 2009, pero es una situación seria que debe mantenernos en guardia", finalizó.