Las bolsas, especialmente las europeas, reciben nuevas
amenazas, las de los récords históricos que alcanza el euro. La divisa
comunitaria fija su techo, al menos provisional, por encima de los 1,603
dólares, con los temores sobre el impacto de la crisis de Fannie Mae y Freddie
Mac, y su posible rescate, como detonante.
Los mercados financieros continúan ofreciendo nuevas señales
de inestabilidad. La brusca escalada que ha protagonizado el euro en las
últimas jornadas ha provocado un nuevo récord en su cotización, superando con
creces la barrera de 1,60 para alcanzar los 1,6036 dólares.
Este rally se ha visto impulsado por las alertas latentes en
el sistema financiero estadounidense. La quiebra de IndyMac y la posibilidad de
que las agencias hipotecarias Fannie Mae y Freddie Mac tengan que ser
rescatadas activa todas las alertas sobre la salud de la mayor economía
mundial.
El euro se había concedido tres meses de relativa tregua,
sin alcanzar los niveles de mediados de abril, cuando superó los 1,60 dólares
para marcar un máximo en 1,6019.
La divisa europea también cotiza cerca de la zona de récords
frente al yen japonés (169), en una jornada en la que el Banco de Japón ha
mantenido los tipos de interés, tal y como se preveía, pero en la que ha
sorprendido al revisar a la baja sus perspectivas para la economía nipona. Las nuevas
estimaciones reducen a un 1,2%, desde el 1,5% anterior, su crecimiento en el
ejercicio fiscal en curso, y que finalizará el próximo 31 de marzo.
Petróleo
La debilidad del dólar no ayuda precisamente a devolver la
calma al mercado del petróleo. El precio del barril tipo West Texas sube más de
un dólar, hasta los 146,4, en la preapertura de Wall Street, cerca de sus
máximos. El precio del barril de Brent se acerca a los 145 dólares.