Un verdadero terremoto político y técnico provocó ayer la publicación del informe final de la comisión externa revisora del Censo 2012, que fue convocada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) con el fin de analizar los procedimientos que fueron aplicados durante el proceso de conteo de población efectuado el año pasado.
La instancia compuesta por Isabel Millán, jefa de División Observatorio Social del Ministerio de Desarrollo Social; David Bravo, director del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile; Magda Ruiz, coordinadora y asesora del área de Demografía e Información sobre Población del Centro Latinoamericano y Caribeño de Demografía (Celade); Osvaldo Larrañaga, asesor de política social del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD); y Felipe Zamorano, jefe de la Comisión de Estudios Habitacionales y Urbanos del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, realizó un claro diagnóstico respecto a los cuestionamientos que comenzaron a mediados del año pasado y que terminaron con la salida de la institución del entonces director de la entidad, el economista Francisco Javier Labbé, y su círculo más cercano.
En un informe de 41 páginas, la comisión señala que el Censo 2012 adolece de serios problemas que son esenciales en un instrumento de ese tipo -por el poco tiempo de preparación con que contó el proceso, un insuficiente financiamiento y un mal clima organizacional al interior del INE- y que la responsabilidad directa de esos hechos recaen en la administración de Labbé.
No obstante, también menciona problemas que se arrastraron desde la administración previa, dado que en 2008 y 2009 se produjeron atrasos y dificultades en los preparativos del proceso.
De acuerdo al cálculo de la comisión, el costo aproximado del fallido proceso censal ascendió a $ 30 mil millones.
Los puntos más destacados del informe que ayer emanó la comisión externa revisora del Censo 2012 fueron los siguientes:
De Censo de hecho
a Censo de derecho
“Para el año 2012 estaba planificado realizar un censo de hecho y así se refleja en los decretos emitidos, el presupuesto solicitado y los diferentes preparativos efectuados. Sin embargo, durante agosto del 2011 la dirección del INE delibera y decide realizar un censo de derecho, iniciativa que fue validada con el Ministerio de Economía, la Presidencia de la República y la Comisión Nacional Censal”.
“El argumento entregado por el director del INE a la Comisión Censal fue que el cambio de metodología de levantamiento reportaría los siguientes beneficios: mejora en calidad de datos, por tener censistas más capacitados y cuya experiencia en terreno permitiría ir mejorando día a día calidad del levantamiento; se facilitaría el proceso logístico ‘minimizando las imputaciones propias del levantamiento de un día’; mejora en la cobertura por contar con personal mejor capacitado y comprometido; seguir la norma de la región puesto que el 73% de los países de Latinoamérica habían migrado a Censo de Derecho; no se paraliza el país por el día feriado cuyo costo estimado sería de 200 millones de dólares”.
“El único riesgo previsto para este cambio metodológico eran problemas de confusión por el concepto de residencia habitual que causaran duplicaciones en los registros de parte de la población. Sin embargo, este riesgo se controlaría con un buen diseño del operativo censal, la capacitación de los censistas y la comunicación a la población”.
“No obstante, de acuerdo al testimonio de diversos entrevistados la razón subyacente de parte del director del INE para cambiar la metodología censal fue la inconveniencia de depositar la realización del censo en la voluntad de los estudiantes, habida cuenta de las masivas paralizaciones y marchas que ocurrían durante el año 2011. Realizar un censo de hecho tenía el riesgo de entregar a los estudiantes una eventual capacidad de veto del proceso”.
Tasa de omisión
“La tasa de omisión de la población asciende, conservadoramente, a un 9,3%, porcentaje que es tres veces los obtenidos en censos recientes en otros países de la región (...) pero puede ser mucho más elevada en determinadas comunas. Las estimaciones muestran que en una quinta parte de las comunas la tasa de omisión superaría un 20%, ya que en ellas se produce una concentración de los factores que causan los problemas de cobertura (...) No obstante, se necesita actualizar los flujos de migración, lo que posiblemente resulte en un incremento en la tasa de omisión censal”.
Repetición del proceso
“Se recomienda la realización de un censo abreviado de población y vivienda en el año 2015, que provea una cifra actualizada del total de población y viviendas a nivel del país, regiones, provincias, comunas, zona urbano/rural; y que caracterice a la población y viviendas en aquellas variables que debe contener un censo”.
Políticas públicas
“La comisión recomienda que, para fines del uso de datos oficiales y de política pública, no se utilicen los datos del proceso 2012 y se espere a tener los resultados del censo abreviado propuesto. En el intertanto se propone seguir utilizando las proyecciones de población disponibles y se recomienda su actualización para el total de la población nacional en el curso del presente año con apoyo técnico de Celade”.
Avance en autonomía
“A futuro la Comisión estima imprescindible que se dote al INE de mayores competencias, recursos y niveles de autonomía para tener una oficina nacional de estadísticas de excelencia, propia del nivel de desarrollo que se aspira para el país. La autonomía debe acompañarse de resguardos para que el futuro INE sea una institución abierta al país y responsable técnica y políticamente de sus acciones”.
Preparativos para Censo 2022
“La Comisión recomienda que se inicien pronto los preparativos del Censo de 2022 y que se tenga en cuenta que la mayoría de los países desarrollados están haciendo uso intensivo de registros administrativos y tecnologías de información para la realización de sus censos, en reemplazo del complejo proceso que significa la visita física a todas las viviendas del país propia de los censos tradicionales”.
Gobierno opta por esperar opinión internacional antes de tomar decisión
Un consejo de gabinete extraordinario convocado por el presidente Sebastián Piñera se realizó ayer en La Moneda, con la idea de tratar el informe de la comisión externa que revisó el Censo 2012.
En horas de la mañana, el documento fue comentado por el director nacional del INE, Juan Eduardo Coeymans, quien señaló que "realmente la radicalidad de la recomendación de repetir un Censo me sorprendió, debo confesar honestamente que le daba una probabilidad muy baja".
Agregó que se solicitará una entidad internacional que realice un diagnóstico de las propuestas de la comisión. "Si a usted un médico le recomienda amputarse una pierna porque tiene un tumor, usted ve que hay un diagnóstico, pero qué es lo que hace, ¿usted va y se amputa la pierna o va donde otro médico para conseguir una segunda opinión? Esta segunda opinión que vamos a pedir no es una idea que se nos ocurrió a raíz del informe. Es algo que he dicho más de una vez (...) si es que hay que hacerlo se hará, pero con un sentido de responsabilidad, uno tiene que consultar una segunda opinión", explicó.
A su juicio aún queda evaluar cuán malos están los datos del Censo 2012, ya que tal como manifestó "no ha habido, como se suponía, manipulación expresa de los datos, eso lo aclaró la comisión, la base de datos está limpia".
Respecto del impacto que tiene en la definición de políticas públicas la utilización de los datos del Censo 2012, Coeymans afirmó que "si es que la evaluación de estos expertos externos señala que de verdad esa información no vale nada, se tendrá que seguir usando, mientras se realiza un nuevo censo, las proyecciones basadas en el Censo de 2002 más las sumas de nacidos menos muertos".
En tanto, el ministro de Economía, Félix de Vicente, tomó la vocería por parte del Ejecutivo, leyendo una declaración de 10 puntos, luego de la que no aceptó preguntas. Ahí, destacó "la constatación de que la información del Censo no se encuentra adulterada y plenamente resguardada (...) además compartimos la recomendación de la comisión de fortalecer la institucionalidad del INE, a través de la creación de una institución autónoma, independiente, profesional dotada de los recursos necesarios para recopilar y procesar la información estadística de nuestro país".
De Vicente reiteró que este ha sido el propósito del proyecto de ley que reformula al INE y que crea una institucionalidad autónoma. "También compartimos la preocupación de la comisión respecto de la alta tasa de omisión registrada en este censo, la que alcanzaría una cifra del orden de 9,2%", dijo.
Finalmente, señaló que se está estudiando el mecanismo para corregir las omisiones del Censo 2012, no descartando la posibilidad de realizar un nuevo proceso. En ese sentido se alineó con la propuesta de Coeymans, quien ya ha contactado a la Comisión Estadística de la Unión Europea y el Banco Mundial.
Osvaldo Larrañaga, Coordinador del Area de Equidad del PNUD: "Todo esto es una recomendación, no hay nada vinculante"
- ¿Cuáles son las implicancias que tiene pasar de un censo de derecho a uno de hecho en 2015?
- El cuestionario es básicamente el mismo, lo que cambia es que el Censo de hecho lo que hace es preguntar en qué vivienda la persona durmió la noche anterior, el de derecho es más complicado porque cuando estás perguntando en un período largo hay mas duplicaciones. Uno de derecho es más complejo ya que cuesta encontrar a la gente en su casa. La principal diferencia tiene que ver con la definición de qué vivienda adscribe la persona y eso lo debe hacer en un tiempo prolongado, en cambio, el de hecho por el tipo de pregunta tienen que hacerse en un día.
- ¿Por qué entonces se cambia de un exitoso Censo de hecho a uno de derecho?
- La razón que entregó el INE fue que no tenía la capacidad para reclutar el número de censistas que requería, entonces optó por el Censo de derecho, menos censistas pero trabajando más días.
- Ustedes proponen un Censo de hecho...
- Deben hacerse muchos cambios y se debe garantizar la transparencia del proceso, lo que no nos puede pasar es que hagamos un Censo en 2015 y tengamos otro Censo mal hecho. Eso es inadmisible. Las cosas específicas son las que el INE tiene que analizar, todo esto es una recomendación, no hay nada vinculante.
David Bravo, director del Centro de Microdatos de la U. de Chile: "Me gustaría que este daño sirviera para fortalecer al INE lo más rápido posible
- ¿Este es el peor escenario que puede enfrentar el Censo 2012?
- No lo sé, uno siempre podría imaginarse escenarios peores. Lo que correspondía acá es transparencia, mostrar qué es lo que ocurrió, y creo que enfrentar eso es fundamental. Los resultados no son positivos, pero lo importante es que sean transparente para todos. Nosotros sentimos como comisión que teníamos un encargo, no sólo del director del INE, sino que de la ciudadanía, del mismo gobierno. Hay que recordar que fue el subsecertario de Economía quien puso los antecedentes en la Fiscalía, por lo que teníamos que hacer un trabajo meticuloso. Si las recomendaciones van a aplicarse o no, no es resorte nuestro, y eso explica porque queríamos acelerar este trabajo.
- ¿Cuánto afecta esta situación a la imagen del INE y de Chile respecto de la seriedad de las estadísticas?
- Este es un episodio lamentable. Me gustaría que ese daño sirviera para fortalecer al INE y hacerlo de la forma más rápida posible, con la mayor cantidad de recursos posibles, humanos y monetarios. Además, deseo que esto no entre en la contienda electoral en razón que acá tenemos una institución del país, por lo tanto, el daño que se ha hecho al no tener un proceso exitoso es un daño para el país y necesitamos dar vuelta la página lo antes posible.