El Gobierno mantuvo su proyección de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) para este año, en la primera actualización que realiza de la situación macro que incorpora los efectos de la guerra comercial desatada por el Gobierno estadounidense desde abril de este año.
En el marco de la presentación del Informe de Finanzas Públicas (IFP) del segundo trimestre, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, expuso ante los senadores de la comisión del ramo que el Gobierno mantiene en 2,5% su estimación de Producto para el actual ejercicio.
En el IFP de abril pasado, el Ejecutivo no había incorporado el impacto del conflicto arancelario, debido a que la situación estaba modificándose diariamente, con alta volatilidad y que los hechos principales ocurrieron luego del cierre estadístico del IFP.
En su exposición, acompañado de la directora de Presupuestos (Dipres), Javiera Martínez, el ministro señaló que Chile no se ha visto mayormente afectado por el conflicto comercial, señalando que la economía chilena es "más resiliente" que otros países para hacer frente a los vaivenes externos.

Entre sus argumentos, expuso que la deuda pública de Chile sigue siendo baja respecto a sus pares, que el sector bancario está adecuadamente capitalizado, y que el país tiene un esquema de tipo de cambio flotante, lo que le da flexibilidad de maniobra en caso de que la situación externa empeore.
"A pesar de los aumentos arancelarios, disputas comerciales y anuncios de arancel al cobre, las proyecciones negativas para Estados Unidos no se han trasladado a Chile, donde las exportaciones continúan creciendo y las condiciones financieras se han estabilizado", dijo la autoridad.
Según expuso el secretario de Estado, la proyección del Ejecutivo va en línea con otros organismos, cuyas apuestas se estarían acercando al 2,5% previsto por Hacienda. Por ejemplo, citó al Banco Central, que en su último Informe de Política Monetaria (IPoM) proyectó un rango de variación entre 2% y 2,75%; la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), con 2,4%; y el Fondo Monetario Internacional (FMI), que apunta a un 2,2%.

El ministro también apuntó a los positivos datos del primer semestre para explicar la mantención de las estimaciones.
Asimismo, Teatinos 120 mantuvo en 2,3% la proyección de expansión de la economía para el 2026, el primer año del Gobierno que asumirá el mando a partir del próximo 11 de marzo.
Mayor cobre
La actualización del panorama macroeconómico también considera una mejoría del PIB no minero, que crecerá un 2,4% en el actual ejercicio, una décima por sobre la proyección del IFP anterior. Aquello contrasta con la corrección a la baja de cuatro décimas en la expectativa del Producto minero, que avanzará un 3,3% en el período.
La perspectiva para la demanda interna se mejoró en cinco décimas, hasta crecer un 3,1% este año.
En cuanto a la inflación, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) no mostró variaciones respecto al IFP anterior, manteniéndose en 4,4% promedio anual.

Hacienda también se hace eco del mayor precio que ha registrado el precio del cobre en las últimas semanas, a la luz de los aranceles que aplicó el Gobierno norteamericano al precio del metal. De esta manera, el Fisco aumentó en dos centavos el valor promedio del metal rojo para este año, a US$ 4,28 la libra.
La proyección del tipo de cambio se redujo de forma relevante, de $ 979 a $ 962 para el cierre de este año.
Mientras que el precio promedio del barril de petróleo WTI -referencial para Chile- se recortó a US$ 66 por unidad, cinco centavos de dólar por debajo de lo anticipado en el IFP del primer trimestre.
Empeora panorama fiscal
Uno de los debates que ha marcado el año económico ha sido el deterioro de las finanzas públicas, luego de que el Fisco incumpliera la meta de déficit estructural en 2024, luego de haberlas cumplido en 2022 y 2023.
Esto llevó al Ejecutivo a entregar un plan de millonarios recortes de gasto, por US$ 2.000 millones para este año, para así retomar la senda de cumplimiento de la meta de balance estructural.
Con este telón de fondo, Hacienda corrigió las proyecciones tanto para el déficit efectivo como el estructural para este año, empeorando levemente las estimaciones.
Así, el déficit efectivo del aparato estatal se empinaría a un 1,5% del PIB este año, una décima peor a lo proyectado en abril pasado.
En cuanto al déficit estructural, el saldo negativo llegaría a 1,8% del tamaño de la economía, cerca de dos décimas mayor a lo estimado hace tres meses.
El Gobierno ratificó que su meta de déficit estructural para este año se mantiene en 1,6% del Producto, para continuar reduciéndose a 1,1% el año próximo. En 2024, para hacerse una idea, el saldo en rojo ascendió a 3,3% del Producto.