La
comisión de Pesca del Parlamento Europeo (PE) rechazó hoy el proyecto de
acuerdo con Chile para la pesca de pez espada en la zona del Pacífico
Sudeste, por considerar que no resuelve los problemas de descarga de la
flota europea.
Los eurodiputados votaron contra la aprobación
del pacto que negoció Bruselas para resolver un conflicto comercial, que
data de los años noventa y que impedía a la flota palangrera
comunitaria descargar y transitar por los puertos chilenos.
Los europarlamentarios afirmaron que el compromiso no soluciona el
problema, ya que las condiciones de acceso a los puertos chilenos
designados "carecen de la concreción y la fiabilidad necesaria para
mejorar su situación", según la presidenta de la comisión de Pesca del
PE, Carmen Fraga (Partido Popular Europeo, PPE).
La
eurodiputada explicó, en un comunicado, que el acuerdo se restringe a la
flota dedicada a capturar pez espada, por lo que no resuelve los
problemas de los barcos pelágicos europeos, que también extraen jurel en
dichas aguas y que sufren las mismas dificultades.
La disputa
empezó hace unos diez años, porque Chile no dejaba usar sus puertos a
los buques españoles dedicados al pez espada, lo que provocó una queja
de la Unión Europea a la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Para resolverla, la Comisión Europea (CE) llegó con las autoridades
chilenas al acuerdo votado hoy por la comisión de la Eurocámara.
En el arreglo se designan tres puertos chilenos, para el acceso de
los buques pesqueros comunitarios que capturan el pez en alta mar en el
Pacífico Sudeste.
El PE subrayó, en el comunicado, que la
pesca de pez espada en esos caladeros está regulada por la Comisión
Interamericana del Atún Tropical (CIAT), "de la que Chile nunca ha
formado parte, pretendiendo aplicar a las flotas su legislación interna,
pese a que la pesquería se realiza en aguas internacionales", fuera de
su Zona Económica Exclusiva.
Por ello, Chile "nunca ha
permitido a los buques europeos el desembarco o el tránsito por sus
puertos, que se ven obligados a transbordar la mercancía en el mar o
perder varios días de navegación hasta alcanzar puertos peruanos,
incluso para poder efectuar un relevo de tripulación.", según la misma
fuente.