En tiempos de bajos precios de los commodities, monedas depreciadas y expectativas de alzas de tasas por parte de la Fed, son pocos los que se arriesgan a apostar por los mercados emergentes. Sin embargo, el banco suizo Lombard Odier -entidad privada que maneja cerca de US$ 150 mil millones y que a nivel global trabaja con Octogone-, lo está recomendando.
Así explica su portfolio manager, Didier Rabattu, quien afirma que justamente éste es el momento de tomar posiciones, ya que, señala, a estos mercados “nunca hay que comprarlos cuando todo el mundo está contento, sino cuando hay sangre en la pared”.
En el área de equity, el banco tiene seis fondos, de los cuales uno se enfoca en consumo en mercados emergentes, y que está diseñado para aprovechar la creciente demanda de la clase media.
-¿Cuál es la oportunidad que presenta este fondo?
-Cada año hay más o menos 100 millones de personas que entran en el mundo de la clase media, es decir, que ganan más de US$ 400-500 al mes. Para tener una clase media tienes que contar con carreteras, aeropuertos; infraestructura en general.
-¿Cómo tienen distribuidas las inversiones?
-En nuestro fondo invertimos en todos los emergentes, tenemos 20% de la cartera en China, 15% en India, 15% en resto de Asia, 7% en el este de Europa, 6% en África, 2% en Turquía, y 17 % en América latina, en Chile es el 3%.
-¿Y cuáles son las apuestas en Chile?
-Cencosud y Andina.
-¿Qué es lo que les gusta de Cencosud?
-La compañía cometió muchos errores en los últimos años (...), entonces levantaron mucha deuda y ahora lo que tienen que hacer es reestructurar y reducirla.
Nos parece que el valor intrínseco de los activos es muy bueno y con lo que van a hacer (la IPO de los centros comerciales) la deuda va a desaparecer.
-¿Andina gusta por los rumores de posible venta?
-Hay muchos rumores. Andina tiene cinco accionistas que tienen el 50% de la compañía y ellos dicen, públicamente, que les gustaría fusionarse. Los fundamentales de Andina son buenísimos en Argentina y en Paraguay, quizás Brasil está un poco más difícil, pero con los otros países produce mucho “cash” y es lo que exactamente queremos.
-¿Cómo ven Chile desde afuera?
-Antes, cuando el precio del cobre bajaba mucho, normalmente Chile entraba en recesión. Ahora las cifras muestran que el país crece al 2%, que no es malo si se compara con Brasil. Escucho a la gente decir que el país está mal, pero no es lo que dicen las cifras, lo que dicen es que el crecimiento se ha ralentizado, pero sigue funcionando correctamente. En América Latina funcionan correctamente México y Chile. Hay un país que está muerto, que es Venezuela y dos países con punto de interrogación, que son Brasil y Argentina.