La región española de Cataluña enfrenta una jornada clave para su futuro hoy, en unas elecciones locales inevitablemente marcadas por los intentos de secesión que realizó el gobierno anterior de Carles Puigdemont.
El expresidente de la Generalitat es uno de los candidatos en los comicios, pero la ventaja la tienen su ex vicepresidente Oriol Junqueras (del partido Esquerra Republicana, ERC) e Inés Arrimadas, del partido de derecha Ciudadanos, que está en contra de la secesión.
Los analistas estiman que, en medio de la alta polarización, la participación podría llegar a un récord, superando a las elecciones autonómicas de 2015, cuando concurrieron a las urnas el 77% de las personas habilitadas para votar.
El fracaso del intento de independencia este año, tras un referendo que fue declarado ilegal por la justicia en Madrid y que Puigdemont llevó a cabo en octubre, estarán en la mente de muchos de los catalanes.
No está claro si ello inclinará la balanza a favor de los candidatos separatistas, que en 2015 lograron 72 diputados en una cámara de 175, o, por el contrario, de quienes defienden la permanencia en España.
El resultado podría influir sobre la economía de todo el país. Cataluña representa cerca de un quinto del Producto Interno Bruto de España, que atraviesa un momento de recuperación económica acelerada y está entre las economías más dinámicas de Europa.