El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke,
confirmó hoy que la economía estadounidense crece con moderación, aunque
advirtió de la lenta recuperación laboral y del alto déficit fiscal, que
obligará al Gobierno a tomar "decisiones difíciles".
En una comparecencia ante el Congreso para dar a conocer las perspectivas
económicas del país, Bernanke dijo que, en términos generales, la economía de
EE.UU. está en la senda de la recuperación, después de haberse visto inmersa en
la peor recesión de los últimos 70 años.
Bernanke sostuvo, utilizando el lenguaje habitual de la Fed, que los tipos se
mantendrán bajos "por un extenso periodo de tiempo".
La rapidez con la que Estados Unidos saldrá definitivamente de la crisis
dependerá, según Bernanke, de dos factores, como es el consumo privado, que ha
estado frenado en los dos últimos años, y la inversión empresarial.
"En términos generales, los datos más recientes sugieren que la demanda
interna será suficiente para promover un crecimiento económico moderado",
apuntó el máximo responsable de la política monetaria estadounidense, quien
resaltó, además, que no se están produciendo tensiones inflacionistas.
No obstante, afirmó, EE.UU. tiene ante sí algunos obstáculos, entre ellos la
debilidad del sector inmobiliario y del mercado laboral, y las dificultades de
las familias y las empresas para acceder a los créditos.