Una fuerte
baja experimentaron los precios internacionales del petróleo, en una jornada marcada
por la negativa evolución de los mercados, en particular el de las materias
primas.
En ese
escenario, el WTI que se cotiza en Nueva York se desplomó hasta los US$ 37,67
por barril, lo que implica un retroceso de US$ 3,04 en relación al cierre del
viernes pasado. Este es el valor más bajo para el precio desde el 24 de
diciembre pasado.
En Londres,
el referencial europeo Brent cerró con un retroceso de US$ 1,48.
Según los
analistas consignados por EFE, la tendencia bajista se debía a la preocupación
de los operadores acerca de la repercusión que está teniendo la crisis
económica mundial en la demanda de "oro negro".
El precio
del crudo ya se abarató notablemente la semana pasada, después de que Estados
Unidos (primer consumidor energético del mundo) informase de un aumento de sus
reservas de petróleo, lo que algunos observadores interpretaron como una prueba
del efecto de la crisis en la caída de la demanda.
También
lastró al crudo la semana pasada el dato de paro de EEUU, que informó de una
pérdida el año pasado de 2,6 millones de empleos, la mayor reducción anual
desde 1945, mientras que el índice de desempleo subió cinco décimas en
diciembre, hasta el 7,2%.
La
divulgación de esas cifras hizo tambalearse tanto a las bolsas de valores como
a los mercados de materias primas de todo el mundo, preocupados por la
evolución de la economía global y el probable retroceso de la demanda de
combustible.
Otros
factores que inquietan a los operadores son la "guerra del gas" entre
Rusia y Ucrania, así como el conflicto de Oriente Próximo, donde siguen los
ataques entre las fuerzas israelíes y la milicias palestinas de la franja de
Gaza.