Coincidentemente con el llamado que horas antes había hecho el presidente del Senado, Manuel José Ossandón, a que los parlamentarios se pusieran de acuerdo en torno a la reforma al sistema político por la importancia que implica para el país y una mejor democracia, la Comisión de Constitución de la Cámara, donde el proyecto se encuentra en segundo trámite, puso en votación la iniciativa.
De este modo y en una votación muy ajustada, la reforma se aprobó en general por siete votos a favor y seis en contra. Los diputados socialistas Raúl Leiva y Leonardo Soto apoyaron la propuesta, mientras que su compañero de partido Marcos Ilabaca la rechazó.
Por su parte, la derecha en pleno se cuadró con la medida, lo que generó la molestia de quienes estaban en contra de la reforma promovida por un grupo transversal de senadores.
Uno de los aspectos más relevantes de la reforma es que establece un umbral de 5% para que los partidos puedan optar a un escaño en la Cámara de Diputados, lo que vuelve más difícil que los partidos pequeños puedan llegar con representantes al Congreso.
Molestia de Mulet
Por lo mismo, es que tras la votación, el diputado Jaime Mulet (FRVS) reiteró que esto confirma que el oficialismo debe postular al Congreso con dos listas y que el proyecto aprobado “mete la mano a la urna, vulnera la soberanía popular y eso es extremadamente grave en una democracia. Por eso creo que es un día lamentable, sobre todo por la incorporación de parlamentarios del Partido Socialista”.