El nivel de endeudamiento del Fisco no deja de crecer y se mantiene en sus niveles más altos desde mediados de los años 90. Así se desprende del último informe de la Dirección de Presupuestos (Dipres), que estima que la deuda pública bruta del Estado (que no considera los activos financieros netos, como los fondos soberanos) subió a 21% del PIB al cierre del tercer trimestre, cuatro décimas más alta que el primer semestre.
De acuerdo a la Dipres, el nivel de acreencias del Fisco supera los US$ 53.000 millones. Este es el nivel de la deuda bruta más alta, en su relación al PIB, desde por lo menos 1994, cuando se ubicaba en cerca de 25 puntos del Producto.
En apenas una década, en tanto, el endeudamiento del Fisco se cuadruplicó. En 2006, la deuda bruta ascendía a apenas 5% de la economía (ver gráfico).
El informe del servicio detalla también que el valor de los activos financieros del Tesoro Público alcanzó a US$ 34.806 millones en el período, lo que representa un 13,9% del Producto.
El alto nivel de endeudamiento del Fisco ha sido uno de los principales puntos de debate en el marco de la ley de Presupuestos del próximo año.
El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, junto al director de Presupuestos, Sergio Granados, informaron que el endeudamiento bruto del Estado superará el 25% del PIB en 2017. Esto, como resultado de un déficit fiscal que superará el 3% del Producto en el período y una solicitud de endeudamiento máximo de US$ 11.500 millones vía bonos para el próximo año.
La semana pasada, la Dipres informó vía oficio a la Primera Subcomisión de Presupuestos que la senda hacia 2020 para la deuda bruta dará cuenta de un incremento que le llevará a superar el 31% del Producto hacia el final de la década.
Incluso, Teatinos 120 planteó en dicho oficio que bajo un escenario más pesimista -menor crecimiento efectivo y potencial de la economía-, la deuda podría superar el 33% del tamaño de la economía hacia el horizonte de proyección.
¿Niveles preocupantes?
Entre los expertos no hay una sola voz respecto al nivel de la deuda pública en el país, ya que si bien recalcan que el endeudamiento se ha incrementado de manera veloz en los últimos años, también ponen en perspectiva que el nivel de acreencias es bajo en comparación con el mundo desarrollado, donde la carga del Fisco incluso supera el 100% del Producto.
El ex subdirector de Presupuestos y académico de la Universidad de Santiago (Usach), Guillermo Pattillo, plantea que los niveles de deuda hoy de por sí nos son “alarmantes”, pero que lo que genera “incertidumbre” es la trayectoria a futuro.
“No hay señales de que la deuda pública acote su expansión hacia adelante. La política fiscal sigue siendo levemente expansiva y hacia adelante se requerirán crecimientos acotados de gasto”, recalca.
El socio de Pacífico Macroeconomía y Finanzas, Igal Magendzo, matiza afirmando que el ratio deuda/PIB “no me preocupa particularmente, más aun considerando que se están haciendo esfuerzos de recortar gasto hacia adelante. Pero aun queda pendiente el debate sobre cómo hacer más efectivo el gasto”.
La economista jefe de Econsult, Michele Labbé, plantea que si la dinámica se mantiene, la posibilidad de una rebaja en la clasificación de riesgo del país “es muy alta”.
“No es descartable que el nivel de gasto hacia adelante deba corregirse para evitar un deterioro mayor de las cuentas fiscales. Pero políticamente se ve difícil que eso pase”.
