La Cámara de Diputados aprobó este martes, por unanimidad, el proyecto de ley que modifica la Ley 19.628, suspendiendo por un plazo determinado la información comercial de las personas cesantes, iniciativa más conocida como "Dicom de los cesantes".
El diputado UDI, Felipe Salaberry, expresó su satisfacción por el respaldo obtenido y explicó que el objetivo de la iniciativa legal es que "la información comercial negativa de algunas personas, no se transforme en un obstáculo para aquellas personas que sufren el dolor de la cesantía".
"Muchas veces un cesante no puede pagar sus compromisos y eso se transforma en un círculo vicioso. Esta ley termina que afecta a las personas que han perdido su trabajo y que, al no pagar sus compromisos, no puede conseguir empleo", precisó el legislador.
En este sentido, el gremialista puntualizó que la nueva ley permite, "por un período acotado de tiempo, de hasta seis meses, que los eventuales protestos o morosidades que una chilena o un chileno que busca trabajo y no ha podido pagar sus deudas, no se transforme en una barrera para conseguir empleo".
Para ello, el proyecto establece que aquellas personas que quedan sin trabajo, puedan recurrir a las administradoras del seguro de cesantía para que éstas informen a las administradoras de base de datos comerciales con el fin que la información relacionada con morosidad o protestos quede "bloqueada" durante tres meses. Ello puede ser prorrogable por una vez, por igual período de tiempo.
En tanto, para quienes no están adscritos al seguro de cesantía, deberán presentar el finiquito de la Inspección del Trabajo ante el Boletín Comercial.
Salaberry detalló que "sólo pueden acceder a este beneficio aquellas personas que hayan tenido, durante el último año, un comportamiento comercial impecable".
"Si bien nuestra legislación contempla que los empleadores no pueden discriminar por la información comercial o financiera de una persona, lamentablemente en la práctica eso ocurre. Por eso, esta es una señal potente del Congreso Nacional para decirle a los empleadores que la información comercial no debe ser un elemento relevante para que una persona pueda conseguir un trabajo", concluyó.