El grupo de inversión Berkshire Hathaway anunció hoy que completó la adquisición de la química Lubrizol por US$ 9.700 millones, una compra que desembocó en la salida de uno de los candidatos a suceder al multimillonario Warren Buffett al frente de la compañía, David Sokol.
"Lubrizol es una gran aportación a la familia de compañías de Berkshire Hathaway", dijo hoy en un comunicado, Buffett, el tercer hombre más rico del planeta según Forbes y quien añadió que prevé "un sólido rendimiento de la empresa mientras ejecuta sus estrategias de crecimiento".
La adquisición de la química, que se convierte así en una subsidiaria de Berkshire Hathaway, se ha realizado a través del pago en efectivo de US$135 por cada una de sus acciones, en una transacción valorada en un total de US$ 9.700 millones que incluyen US$ 700 millones de deuda de la firma.
La operación fue anunciada en pasado marzo, cuando los consejos de administración de ambas compañías ya habían dado el visto bueno a la compra, pero ahora ha recibido también la luz verde de las autoridades reguladoras tanto dentro como fuera de EEUU.
La compra de Lubrizol desembocó en la salida de uno de los "delfines" de Buffett y candidato en todas las quinielas a sucederle al frente de la compañía, David Sokol, después de que se conociera que compró 96.060 acciones de esa química entre el 5 y 7 de enero de este año, unos diez días antes de sugerir a Berkshire que se hiciera con ella.
La adquisición de esas acciones salió a la luz cuando Buffett emitió un comunicado en el que anunció la salida de Sokol y en el que detalló la compra de títulos de la compañía química por parte del directivo, aunque entonces afirmó: "Ni Dave (Sokol) ni yo creemos que sus compras de acciones de Lubrizol fueran de ninguna manera ilegales".
Sin embargo, un mes después Berkshire Hathaway reconoció que su exdirectivo "violó las normas de la compañía", incluyendo su código ético y sus políticas sobre información privilegiada.