El presidente de Sony en Francia, Serge Foucher, permaneció
la pasada noche retenido en la fábrica del grupo en Pontonx-sur-l'Ardour, al
suroeste del país, por los trabajadores de la planta descontentos por la
intención de la empresa de cerrarla de forma definitiva.
Foucher fue liberado a primera hora de la mañana tras
comprometerse a proseguir las negociaciones con los 311 trabajadores de la
fábrica, a la que había acudido para explicarles el plan de cierre de la
factoría especializada en la fabricación de soportes magnéticos, según fuentes
oficiales.
El jueves por la tarde los empleados, que recibieron al
directivo en un ambiente hostil, reclamaban un plan social más ventajoso ante
el cierre de la planta.
Descontentos con las explicaciones del directivo, los
trabajadores le impidieron abandonar la sala de reuniones durante toda la noche
y bloquearon el acceso a la planta con troncos de árboles.
Sólo la mediación de las autoridades permitió esta mañana la
liberación de forma pacífica del directivo, que se encontraba junto con su
director de recursos humanos.
Las negociaciones continuarán hoy en los locales de la Prefectura, tras el
compromiso de Foucher de seguir dialogando con los representantes de los
empleados.
Sony presentó hace unos meses un proyecto de cesión de la
empresa para reconvertirla en una planta de ensamblaje de paneles solares.
Los trabajadores se oponían al plan de la multinacional y
denunciaron la falta de información sobre sus intenciones.