La empresa japonesa Line tuvo un exitoso debut en la bolsa de Tokio el viernes, extendiendo un sólido inicio de operaciones en Nueva York el día anterior, y elevando el valor de la firma de aplicación de mensajería a US$ 8.600 millones en la mayor apertura bursátil del sector tecnológico este año. Ahora los analistas se preguntan si este éxito será duradero y si la empresa será capaz de hacer frente a la competencia de aplicaciones como WhatsApp y WeChat buscando nuevas fuentes de crecimiento.
Line abrió con un alza de 48,5% en la bolsa de Tokio, para luego cerrar con un avance de 31,7%, en 4.345 yenes. El hecho de que el operador de la séptima aplicación de mensajería más usada del mundo se haya listado primero en Nueva York fue visto como un desafío a sus pares globales. “Estamos entregando el mismo tipo de servicios de Facebook y Google, los gigantes de Internet del mundo”, afirmó el director ejecutivo, Takeshi Idezawa, el viernes. “Pelear en la misma arena digital con ellos es extremadamente importante para nosotros”.
Pero pese a sus aspiraciones, los 218 millones de usuarios activos mensuales a nivel global de Line son una fracción de los 1.000 millones que tiene el líder del mercado, WhatsApp, y los 900 millones de Messenger, ambos propiedad de Facebook. WeChat, de Tencent, que domina el mercado chino, tiene 697 millones.
Line, que se lanzó como una alternativa de comunicación tras el terremoto y tsunami de 2011, rápidamente llegó a ser la plataforma de mensajería móvil dominante de Japón. Actualmente, tiene un ecosistema de servicios que se extienden desde los juegos hasta los taxis on demand y los medios de streaming.
Desafío de monetizar
Una de las claves de su éxito es que ha sabido monetizar su base de usuarios, generando más de
US$ 800 millones en ingresos a través de la venta de stickers virtuales y juegos el año pasado. Su negocio de publicidad también ha crecido, hasta pasar a representar un tercio de las ventas anuales, llegando a 120.700 millones de yenes (US$ 1.146 millones).
Pero el crecimiento se está desacelerando, mientras rivales como Facebook y Snapchat se están poniendo al día y están convirtiendo a sus aplicaciones en plataformas que brindan servicios pagados.
El éxito futuro de la empresa depende de su capacidad de ganar nuevas audiencias. Por eso, la compañía planea usar lo recaudado en la apertura a bolsa para adquirir tecnologías de realidad aumentada, data mining y motores de recomendación para desafiar a sus rivales.
Know how asiático
Otra de las apuestas de Line es usar su know how del mercado asiático. “Nuestros competidores tienen una gran cantidad de dinero, así es que no podemos competir en ese aspecto. Debemos tener reglas del juego distintas, usando la localización y culturización”, afirmó Hwang In-Joon, el director de finanzas de Line, en entrevista con Financial Times.
A diferencia de Facebook, cuyos servicios están estandarizados en todo el mundo, Line y WeChat han modificado sus servicios para adaptarse a la cultura local. La mayoría de los usuarios de Line se concentran en Japón, Taiwán y Tailandia. En lugar de competir con Messenger y WhatsApp en Europa y EEUU, la empresa se ha enfocado por ahora en los mercados de Asia emergente y Medio Oriente. Y ahora está adaptando su servicio a países como Malasia e Indonesia, donde la adopción de smartphones ha sido más lenta.
Pese a tener menos usuarios y un menor alcance geográfico, el fundador de la aplicación, que es propiedad del principal portal de Internet de Corea del Sur, Naver, dijo que los actores asiáticos tienen más experiencia e historia en la creación de hubs que ofrecen un portal “todo en uno” para pagos, entregas y entretenimiento.
“Nos damos cuenta de que Facebook ha evolucionado en la misma dirección que nosotros, pero estamos confiados de que estamos más avanzados en términos de crear un modelo de portal inteligente para todo”, expresó Shin, quien ejerce como director global de Line, a FT.
