Cumplieron su palabra. Los hackers que atacaron la página web Ashley Madison, la cual se promociona como un sitio para infieles, publicaron lo que dicen es la información personal, incluyendo nombres, direcciones de correo electrónico, números de teléfono y números de tarjetas de crédito parciales de 37 millones de usuarios.
Así, los seguidores de la página cuyo slogan es "la vida es corta. Ten una aventura" se encuentran dentro del archivo de 10 gigabytes lanzado en BitTorrent y la llamada "web profunda", con datos de dirección postal, descripción de usuarios, peso y la altura, contraseñas cifradas, números de tarjetas de crédito parciales y detalles de transacciones.
Por ejemplo, The Guardian confirmó que la dirección de correo electrónico y los detalles de un periodista que había utilizado Ashley Madison como parte de una investigación se encuentra en la base de datos publicada el martes por la noche.
Frente a esta situación, Ashley Madison dijo: "Este evento no es un acto de hacktivismo, es un acto criminal contra los miembros individuales de AshleyMadison.com, así como contra cualquier librepensador que elige participar en actividades en línea totalmente legales ".
Ciberataque
El pasado mes de julio, Avid Life, propietario del sitio web especializado en citas, admitió haber sido víctima de un ciberataque.
El grupo, con base en Canadá, se disculpó por "la intrusión criminal", sin detallar -en ese momento- la gravedad del ataque.
Según la compañía, adoptaron varias medidas para "eliminar las publicaciones relacionadas con este incidente", asegurando los sitios web y cerrando los puntos de acceso no autorizados.
La brecha de seguridad se produjo justo tres meses después de que Ashley Madison anunciara sus planes de realizar una oferta pública inicial en Londres a fines de este año. Avid Life no reveló si el ataque podría afectar a sus planes de listarse al mercado.
Según KrebsOnSecurity, el blog de seguridad que dio la noticia, un grupo llamado "The Impact Team" se atribuyó la autoría del ataque. Su queja parece ser que cuando los suscriptores pagaban US$ 19 por la "completa eliminación" de sus datos, los detalles de la compra de los usuarios, incluyendo el nombre real y la dirección, eran presuntamente retenidos.