El subsecretario kuwaití de Finanzas, Jalifa Hamada, anunció ayer que su país desarrollará un plan para poner en venta acciones de empresas petroleras, en una medida similar a la anunciada recientemente por Arabia Saudita.
En una entrevista al periódico saudí Al Iqtisadiya (La Economía), Hamada sostuvo que esta iniciativa se enmarca en un programa de privatización al que los países de la región están recurriendo debido a la caída de los precios del petróleo. No obstante, la autoridad no dio fechas ni determinó el porcentaje de acciones que se ofertarán en las futuras licitaciones públicas.
La Compañía del Petróleo de Kuwait -una empresa estatal que administra los asuntos energéticos del emirato y que posee varias instituciones filiales- proporciona el 92% de los ingresos nacionales.
El país genera 3 millones de barriles diarios de crudo y es el séptimo mayor productor del hidrocarburo en el mundo y el sexto en reservas, según cifras de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Tras Arabia Saudita, Kuwait se convierte en el segundo país del Consejo de Cooperación del Golfo Pérsico (CCG) que anuncia una privatización de una parte de su industria del crudo.
El pasado 25 de abril, el gobierno de Riad, presidido por el rey Salman bin Abdelaziz, aprobó un ambicioso plan para reducir la dependencia del petróleo, desarrollando las inversiones y aumentando las exportaciones no petroleras de aquí al año 2030.
El programa “Proyecto de la Visión de Arabia Saudita-2030”, incluye, entre otras cosas, la venta de hasta un 5% de las acciones de la empresa estatal Saudí Aramco y sus compañías filiales y la salida a bolsa de la firma. Saudi Aramco, la mayor productora mundial de petróleo, ya había anunciado el pasado enero que barajaba salir a bolsa a través de la venta de acciones.