El Gobierno de Australia
fomentará que los trabajadores en edad de jubilación prolonguen su
vida laboral para contrarrestar los efectos del envejecimiento de la
población en la economía del país, indicaron hoy fuentes oficiales.
El ministro del Tesoro, Wayne Swan, anunció esta medida dentro
del plan de 43 millones de dólares australianos (US$ 37,9 millones) que presentó para evitar que el aumento de la población, que
pasará de los 22 millones actuales a los 36 millones en 2050, ponga
en peligro las cuentas públicas.
El número de australianos entre 65 y 84 años se duplicará, con lo
que el gasto del Gobierno en costos de servicios médicos y sociales
para los mayores representará la mitad de su gasto total.
El plan tiene como objetivos prioritarios mejorar la
productividad y eliminar los obstáculos que impiden a los
australianos mayores alargar su vida laboral, principalmente
mediante cursos para que actualicen sus conocimientos.
"De esta forma, no sólo mejoraríamos su calidad de vida sino que
reforzaríamos la economía", recalcó Wayne, que reconoció que el plan
podría ir acompañado de incentivos fiscales.
Si no se hace nada para corregir esta perspectiva la deuda neta
de Australia será del 20% del Producto Interior Bruto y el
presupuesto tendrá un déficit del 3,75% en 2050, si se
compara con las últimas proyecciones presupuestarias.