El multimillonario inversor estadounidense Warren Buffett se mostró hoy confiado en que republicanos y demócratas del Congreso alcanzarán un pacto que solucione la crisis fiscal que afronta el país, aunque dudó que éste se produzca antes de fin de año.
"Yo creo que van a llegar a un acuerdo, pero no estoy seguro de que vayan a conseguirlo para el 31 de diciembre", dijo hoy al canal de información financiera CNBC el llamado "Oráculo de Omaha", como ha sido apodado en referencia a su localidad natal en el estado de Nebraska.
A juicio de Buffett, Washington debería acordar un plan que implique ingresos de 18,5% en relación al Producto Interior Bruto y gastos de 21%, niveles que consideró "sostenibles" para evitar que la deuda pública siga subiendo.
El tercer hombre más rico del mundo según Forbes afirmó que no sería "el fin del mundo" si ese compromiso se alcanza poco después de la fecha límite del 31 de diciembre, cuando está previsto que entren en vigor de forma automática unas subidas de impuestos y recortes del gasto público denominados "precipicio fiscal".
El multimillonario publicó esta semana un artículo de opinión en el diario The New York Times en el que reiteraba su llamado a que se eleven los impuestos a los más ricos como él, como ya había hecho en agosto del año pasado en lo que terminó por denominarse la "regla Buffett".
Si bien su plan fue respaldado por el presidente de EEUU, Barack Obama, que incluso lo convirtió en uno de los principales puntos de su campaña antes de las pasadas elecciones del 6 de noviembre, Buffett indicó su desacuerdo con el mandatario sobre el aumento de los impuestos a las rentas de más de US$250.000 al año.
A juicio de Buffett, las exenciones impositivas aprobadas en 2003 por el entonces presidente George W. Bush y prorrogadas por Obama en 2010 solamente deberían expirar para aquellos hogares estadounidenses que ganen más de US$500.000 al año, y no para aquellos que ingresan más de US$250.000.