El diferencial entre la rentabilidad del bono español y alemán a diez años cayó por debajo de 300 puntos básicos tras llegar a superar el nivel de 400 puntos durante la mañana. El pasado viernes, la prima de riesgo cerró en 370 puntos.
En concreto, el indicador para España acabó la sesión con la caída más pronunciada desde la entrada en el euro para acabar en los 289 puntos. La rentabilidad del bono español a diez años, que durante toda la semana pasada se mantuvo muy por encima de 6%, cerró en 5,15%, mientras que la del bono alemán quedó en 2,26%. La prima de riesgo llegó a tocar un mínimo de 276 puntos.
Algo similar sucede con la deuda italiana, aunque acabó por encima de 301 puntos. Su prima de riesgo cerró en los 301 puntos básicos.
Respecto al resto de países periféricos de la zona euro, las acciones de los últimos días del organismo encabezado por Trichet siguieron contribuyendo a relajar la situación.
Así, la rentabilidad de los bonos irlandeses a 10 años bajó casi una décima, hasta 9,73%, con lo que su prima de riesgo se situó en 747,6 puntos básicos, mientras que el rendimiento de los títulos portugueses cayó casi tres décimas, hasta 10,3%, de modo que su riesgo país se colocó en 805,7 puntos básicos.