A ocho meses de su última revisión, este lunes la Comisión de Hacienda del Senado retomó el debate del proyecto de ley que crea una Agencia de Financiamiento e Inversión para el Desarrollo (Afide), y la autoriza a participar en fondos de fondos de capital de riesgo para startups.
El proyecto de ley del Ejecutivo ingresó al Congreso en mayo de 2024 en el marco del denominado pacto fiscal. Su objetivo es aumentar la inversión en innovación y desarrollo tecnológico para mejorar la productividad del país, inspirado en prácticas de Francia, Portugal y Alemania.
De acuerdo a la propuesta, la Afide operará como una sociedad anónima regulada por la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) y contempla el traspaso de la Gerencia de Inversión y Financiamiento de Corfo y de US$ 485 millones de esta agencia y US$ 4,9 millones del Fisco.
La Afide podrá entregar financiamiento a proyectos a través de créditos sindicados con la banca privada, la que pondrá como mínimo un 20% del total. También contempla la creación del Fondo de Garantías para el Desarrollo (Fogade) que garantizará instrumentos, productos u operaciones financieras para iniciativas empresariales y de transformación y diversificación productiva, con foco adopción tecnológica.
La principal novedad es la autorización que se le dará a la agencia para participar en un fondo de fondos, es decir, instrumentos de inversión público-privada que invierten en varios fondos de capital de riesgo para startups, uno de los anhelos de esta industria, lo que permitiría la entrada de inversionistas institucionales, como la Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP).
En la comisión, la subsecretaria de Economía, Javiera Petersen, explicó que la participación máxima de Afide en este fondo de fondos sería de 35% y el resto debería ser aportado por multilaterales e institucionales
Como referencia, en otras instancias, Petersen ha dicho que el fondo sería de unos US$ 200 millones.
Los cuestionamientos
Al momento del debate, solo había dos senadores titulares de la Comisión de Hacienda, Rodrigo Galilea, que estaba como presidente (s) en reemplazo de la senadora Ximena Rincón, y José Miguel Insulza (PS), además del suplente, Carlos Kuschel (RN).
Las dudas vinieron de los senadores RN. Galilea planteó si se consideró replicar los bancos de fomento que existieron en Chile hasta la década de 1980 en lugar de crear una agencia, dudas respecto del traspaso y retiro de fondos y si la Afide como sociedad anónima estaría obligada a repartir utilidades al Estado.
La subsecretaria Petersen explicó que la tendencia internacional ha evolucionado hacia agencias financieras especializadas y reguladas bajo estándares bancarios más flexibles que un banco de desarrollo tradicional, lo que permitiría que “las empresas puedan hacer mayor inversión en innovación y desarrollo tecnológico”.
Respecto del traspaso de fondos desde Corfo, precisó que el proceso tendrá un plazo de siete años, aunque el aporte deberá completarse en los primeros 18 meses para garantizar la continuidad de los programas en ejecución y dijo que el tema del reparto de utilidades al Estado “lo vamos a ver más adelante”.
Los senadores manifestaron dudas en torno a potenciales retiros del Estado, como ocurrió con los US$ 3.000 millones extraídos de Corfo en 2023. Petersen afirmó que en el nuevo diseño cualquier retiro requerirá autorización de la CMF, y que la Afide estará obligada a mantener un patrimonio mínimo inamovible de UF 800 mil.
Galilea también consultó si solo podrán acceder a los instrumentos startups de alto riesgo. La subsecretaria respondió que la prioridad serán empresas con trayectoria y capacidad de modernizar procesos productivos, con foco en adopción tecnológica y agregó que las startups podrán acceder a créditos sindicados con participación de la banca privada.