La Oficina del Gabinete del Gobierno nipón aprobó hoy un
presupuesto estatal récord de 88,55 billones de yenes (US$ 976.812 millones)
para el año fiscal 2009, que finaliza en marzo de 2010, y que incluye medidas
contra la crisis económica.
Según la agencia local de noticias Kyodo, el nuevo
presupuesto se centrará más en medidas de ayuda a las familias, las empresas y
las provincias afectadas por la crisis, que en cuestiones de rehabilitación
fiscal.
El Gobierno del primer ministro nipón, Taro Aso, propondrá
este presupuesto para 2009 en el Parlamento alrededor del 19 de enero, días
después de presentar el presupuesto adicional para el actual ejercicio fiscal,
que finaliza en marzo del año que viene.
El presupuesto para el año fiscal 2009, que comienza el
próximo 1 de abril, supera en un 6,6 % al establecido inicialmente para 2008.
Este aumento viene explicado en parte por la mayor cantidad
de fondos que el Gobierno nipón planea dedicar al sistema de pensiones
nacional, debido al acusado envejecimiento de la población nipona.
El nuevo presupuesto además aumenta un 1,3% los fondos
destinados a subvenciones y asistencia técnica por primera vez en nueve años,
sin embargo la partida oficial de Ayuda Pública al Desarrollo (ADP) es un 4 %
menor que el año anterior.
Aún así, el Gobierno calcula que el volumen total de ADP
crecerá un 14% interanual durante todo el año fiscal 2009 cuando se le incluyan
las financiaciones especiales y las contribuciones a organizaciones
internacionales, según Kyodo.
La Administración de Aso prevé asimismo destinar 333.000
millones de yenes (US$ 3.686 millones) para las establecidas como "áreas
prioritarias", entre ellas la seguridad laboral, el bienestar social, la
prevención de desastres y la revitalización de las economías regionales.
Por ejemplo, el gasto destinado a la estabilización del
mercado laboral crecerá un 60 % en 2009 hasta los 533.600 millones de yenes (US$
5.905 millones), debido a los efectos sobre el empleo de la actual crisis.
Ante la situación actual de inestabilidad económica, el
presupuesto de 2009 establece un billón de yenes (US$ 11.068 millones) para
reservas especiales de emergencia, que se unirán a los 350.000 millones de
yenes (US$ 3.874 millones) de reservas ordinarias.
El total de las reservas, que asciende a 1,35 billones de
yenes (US$ 14.941 millones), será el mayor de la historia de Japón, según el
Gobierno.
El nuevo presupuesto contempla también un máximo histórico
de gastos generales que se sitúa en los 51,73 billones de yenes (US$ 572.562
millones), un 9,4 % mayor que el establecido en el presupuesto inicial del
ejercicio fiscal 2008.
Sin embargo, dentro de esta partida de gastos generales, el
Gobierno planea recortar un 5,2 % la inversión en proyectos públicos de
construcción y un 0,1 % la
de Defensa.