El director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, destacó hoy que
aunque la crisis no ha terminado "podemos ver luz al final del túnel",
y subrayó que las condiciones financieras han mejorado y que el motor
del crecimiento "parece haber arrancado de nuevo".
Durante un discurso pronunciado en Nueva York en la antesala de
la celebración de la cumbre del G-20, que comenzará mañana en
Pittsburgh, Strauss-Kahn precisó que, aunque se reasuma el crecimiento,
llevará algún tiempo que se recupere el empleo.
"El desempleo podría muy bien seguir creciendo durante el próximo
año, incluso si la economía rebota", explicó el director del Fondo,
quien aseguró que la crisis no se ha acabado "para las personas que
perdieron su empleo".
Strauss-Kahn alertó sobre que en muchos países, particularmente en
los que no cuentan con una política adecuada de protección social, la
pobreza generada por la crisis persistirá "y con ello los riesgos sobre
la estabilidad social", explicó.
Según aclaró, el problema es particularmente grave en el caso de los
países pobres, donde la población es "especialmente vulnerable",
señaló, citando como ejemplo los países del Africa subsahariana.
"Las consecuencias pueden ser desastrosas, nuestros colegas de la
ONU y el Banco Mundial creen que hasta 90 millones de personas pueden
entrar en extrema pobreza como resultados de la crisis", aseguró
Strauss-Kahn, quien habló de un deterioro de los indicadores sociales.