La abrupta caída del crecimiento en
Estados Unidos, sumada a otros indicadores negativos, arrastró hoy a
la bolsa de Sao Paulo, que terminó con un retroceso de 0,84% en su
índice Ibovespa y 39.303 puntos.
En el cómputo de la semana, el selectivo del mayor mercado
bursátil de América Latina tuvo un comportamiento positivo y subió
un 3,06%, apoyado en el buen ritmo de las grandes empresas
brasileñas, que avanzaron en el período por el precio de las
materias primas.
En la jornada de este viernes, el Ibovespa perdió 335 unidades y
acumuló dos días consecutivos en rojo, con los últimos datos que
constatan el enfriamiento de la economía estadounidense, primer
socio comercial de Brasil.
La contracción del PIB de Estados Unidos en un 3,8% en el cuarto
trimestre de 2008, en términos interanuales, lastró los negocios del
parqué paulista, aunque no causó ningún batacazo extraordinario,
puesto que los inversores esperaban que el agujero en la economía de
ese país fuese mayor.
Las pérdidas estuvieron bastante extendidas en el conjunto del
parqué, en el que cerraron en rojo 42 de los 66 títulos que componen
el Ibovespa, pero los principales daños se concentraron en el sector
minero y siderúrgico.
La norma incluida en el plan de rescate de Estados Unidos que
establece que las nuevas obras de infraestructura deben usar acero
de fabricación nacional no augura buenos negocios para las empresas
brasileñas, que reaccionaron de forma negativa al anuncio y
ahondaron las pérdidas.
La compañía minera Vale, la mayor exportadora mundial de pelotas
de hierro y segunda empresa por volumen de negocios en la sesión de
hoy, perdió 1,71% en sus papeles preferenciales.
La petrolera estatal Petrobras, cuyos títulos preferenciales
fueron los líderes en los negocios, tampoco contribuyeron a inclinar
la balanza hacia el signo positivo, puesto que cerraron sin cambios
con respecto a la sesión del jueves.
La mayor subida de la jornada, con un 3,75%, fue para las
acciones preferenciales de la empresa alimentaria Sadia, mientras
que los papeles ordinarios de la propia bolsa (BM&F) registraron la
caída más importante con un 2,33% en rojo.
Se cerraron 189.259 negocios, que movieron 2.958.528.839,25
reales (unos US$1.276 millones).